capitulo 1

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Aca una nueva historia,realmente eh sentido que esta querida serie a quedado en el olvido.

Por lo que voy a intentar revivir al fandom o por lo menos llamar un poco la atención de este.

Realmente espero que les guste y lo disfruten, no se olviden dejar su estrellita y su comentario si quieren más.

Y decidí pasar esta historia a esta cuenta ya que me di cuenta que realmente necesitaba publicar historias nuevas, sin mas.

Comenzemos~

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Reki.

Ya había pasado un día desde la pelea con langa y aun no me atrevía a mirarlo a la cara, talvez fui un egoísta por pensar en mi o nose. Realmente siento que las cosas se están llendo cuesta abajo, nose que hacer el pánico me domina y siento como los recuerdos de la pelea vienen a mi, más que lo pienso más idiota me siento.

Miró por mi ventana como se va asomando el sol desde ya un par de días he empezado nuevamente con el insomnio y justo cuando penze que ya había superado eso.

Hironico no?

Desde lo sucedido no e vuelto a hablar con nadie y mi mamá cada vez pregunta por langa o por si no iré a patinar.

Me quedé observando el techo un largo rato parece por lo que pude notar mi despertador empezó a sonar demaciado fuerte como para traerme devuelta a la realidad con pereza me fui levantando, aunque, las ganas no pareciera que quieran venir.

Me dirigi al baño antes de que mi madre y mis hermanas se levanten, detesto el silencio solo me hace recordar lo patético que soy, pero aún así no puedo dejar que eso me domine.

Salí del baño ya cambiado si se podría decir, aunque tuviera unas ojeras más enormes que nose, me encamine hacia la cocina y empeze a hacer el desayuno para mi mama y mis hermanas, no había sentido cuando mi madre entró por lo que pegue un brinco al escucharla atrás mio.

—Buenos días cariño — me dijo con un tono suave y dulce mientras se reía bajo por mi reacción anterior.

—Buenos días —le conteste de la misma forma mientras le devolvía la sonrisa.

No podía dejar que mi mamá y mis hermanas me vieran así, debo ser fuerte por ellas aunque se que me siento pésimos.

—Eso huele delicioso —dijo mientras acomodaba la mesa para que desayunaramos.

—Mis hermanas ya despertaron?

—No, quieres ir a despertarla?

La verdad no sentía tantos ánimos para ir, sin decir nada le di un asentimiento mientras me dirigia hacia las escaleras rumbo al cuarto de koyomi, entre con cuidado de no despertarla para luego lanzarme arriba de ella y darle caricias en la cabeza.

Un quejido bajo las sábanas se habia escuchado haciendo que mi sonrisa se ensanche más, pude ver como me veía con reclamo mientras le seguía acariciando la cabeza.

—Quítate que no eres liviano —me había dicho mientras se relajaba con mis acaricias.

—El desayuno ya está listo, levántate —le había dicho antes de levantarme y depositarse un beso en la frente.

Salí del cuanto dirigiéndome a la habitación de las gemelas, una vez más me adentre con cuidado mientras me hacercaba a la cama de nanaka y acariciar su cabeza mientras repartía besos por toda su cara con risas fue despertando para verme y sonreírme.

—Es hora de levantarse peque —luego de terminar de levantarla me dirigi a chihiro a ella le empeze a acariciar su cachete con cuidado y le repartía besos en la cara no había tardado mucho en levantarse.

el dolor de la verdad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora