Quedan dos días para el cumpleaños de Nicki. Hoy es 23, para ser exactos.
Nos quedan dos días para pintar un dibujo sobre la serie favorita de Nicki en una cartulina blanca que, por cierto, aún no hemos comenzado. Por eso, ese mismo día nos levantamos temprano para empezar a dibujarlo fijándonos en la imagen desde el portátil de Eric.
- Mira, esto es muy fácil- comencé a hablar- se divide el dibujo por la mitad y cada uno pinta una parte- expliqué.
- Vale, yo de mitad para abajo- pidió y yo resoplé, pero no discutí.
- Bueno, empezemos que sino no lo acabamos nunca- suspiré.
Nos pasamos toda la mañana dibujando la ilustración y desayunando un paquete de cereales que compramos hace unos días, estuvimos con imitando el dibujo hasta que nos quedó perfecto e hicimos algo de comer rápido para seguir con él, hasta ahora solo lo habíamos perfilado todo el dibujo con un stabilo point 88 negro con punta 0.4 mm y un bolígrafo con punta de 0.8 mm de la marca Staedtler.
- Que bueno es saber dibujar- reflexiona Eric en voz alta.
- Y qué bueno es ser profesora de primaria- comenté.
- Y youtuber, también- dijo y yo me reí.
- Traigo los lápices o los rotuladores- le pregunté.
- Los lápices mejor y la goma esa que borra los colores- respondió.
- Vale- dije y subí a por el pequeño estuche con los colores de la marca Arteza y una goma de color azul Staedtler con otra normal Milan 430.
- Listo, a dibujar- informé.
- Manos a la obra- chocamos las manos y seguimos para terminar el dibujo.
Durante toda la tarde, nos pusimos a pintar mirando la imagen y sin dejar un hueco en blanco, nos quedaba mucho más dibujo pero nos estábamos dejando la vista allí y decidimos cenar una ensalada entre los dos para después irnos a dormir.
Es impresionante lo que cansa pintar, pensé.
- Venga, hasta mañana- me despedí subiendo arriba.
Me hice dos trenzas en el pelo y me puse un pijama. Me metí debajo de las sábanas y me dormí al instante.
Al día siguiente, hice la misma rutina de siempre con una pequeña diferencia, me vestí con un un pantalón vaquero negro de tiro alto que me tapaban los cordones de las converse blancas, una camiseta del merch de Duki y una sudadera marrón por encima en la que pone Brooklyn. Salí del dormitorio con un bolso blanco acolchado donde metí todo lo necesario y nos encaminamos para el centro comercial más cercano donde estuvimos toda la mañana mirando cosas que comprarle, miramos ropa, accesorios, libros y muchas más cosas. Terminamos comprando una sudadera que el otro día no había de su talla y un libro que me comentó que quería leerlo.
- Bueno, los regalos los tenemos por lo menos, menos la cartulina- dije riendo ante lo último.
- Comemos aquí- propuso mientras yo miraba la pantalla de la televisión donde estaba puesto el FC Barcelona contra Athletic de Bilbao y yo asentí.
Después de comer y que el partido terminará con victoria para el equipo catalán con un 2-1, volvimos al coche donde guardamos los dos regalos en el maletero y nos encaminamos al apartamento donde volvimos a pasarnos la tarde pintando en la cartulina que conseguimos terminar perfectamente, le saqué una foto enviándola a mi primo al que también le encanta la serie y no me contestó, así que, dejé el teléfono en la mesa de la cocina después de ver que eran las ocho de la noche.
El dibujo es sobre la serie rebelde way y estábamos dibujando a algunos de los personajes de la serie en una playa como fondo porque el que tiene no nos gusta, él se dedicó a hacer parte del cuerpo y toda la arena de la playa mientras que yo pinté el agua y las cabezas de los adolescentes.
- Jugamos al uno- le pregunté cuando llegó de meter el regalo en el maletero del coche.
- Te vas a cagar- respondió él y yo sonreí divertida.
- Si ambos sabemos que la que va a ganar soy yo- reté.
- Reparto yo, reparto yo- dijo quitándome las cartas de la mano.
Repartió las primeras siete cartas para cada uno, colocó la primera que fue un siete verde y dejó el montón de cartas sobrantes en la mesa, comenzando yo la partida tiré un dos del mismo color y seguimos así hasta que termine ganando con un cinco amarillo. En la segunda partida me tocó barajar y repartir las cartas yo, y así consecutivamente, hasta que nos aburrimos de jugar con una victoria aplastante mía, 3-6 con tres puntos a mi favor.
- Al cinquillo- preguntó Eric y yo asentí.
- Venga va, unas partidas a eso- respondí- voy a buscarlas- avisé.
- Vale, yo voy a hacer la cena- yo le di un ok con el dedo pulgar y subí arriba, aprovechando el tiempo, me puse mi pijama y unos calcetines altos que me los subí hasta arriba, busqué las cartas en mi mochila. Cuando las encontré, las saqué de esta y bajé de nuevo.
- ¿Cómo se tarda tanto en encontrar unas cartas?- preguntó irónico y yo le saqué la lengua.
- Me estaba cambiando, idiota- respondí burlona y empezó a barajar las cartas bien.
El juego consiste en repartir todas las cartas entre los jugadores que hayan y empieza la partida la persona que tenga el cinco de oro, se juega con la baraja española, y consiste en ir tirando una carta cada uno haciendo una especie de escalera con los números en cada tipo de carta, en el oro, el basto, la espada y la copa. El juego termina cuando las cuatro están completas y gana el primero que se quedé sin cartas.
- No me gana nadie- grité celebrando la victoria.
- Haces trampa, seguro- amenazó Eric.
- Que va, eres un picado de mierda. Si eres malo no es culpa mía- dije y subí para arriba por segunda vez en la noche volviendo a abajo con mi oso de peluche entre brazos.
- Voy a ver la tele, a ver si puedo poner La que se avecina por alguna página de estas en Internet- yo reí.
- Vale, a ver si te sale antes de que me duerma- bromeé.
- Idiota-.
- Gilipollas-.
Me tapé con la manta negra que me compré y Eric conectó la pantalla del portátil por bluetooth, él me miró y me reí justo cuando sonó la introducción de la serie. Puso la temporada cuatro, capítulo diez y me acomodé para ver el capítulo más cómoda, aunque no acabé de verlo porque me dormí en el sofá.
En menos de 24 horas estaré en una fiesta a la cual casi no me apetece ir, con una sensación rara en el cuerpo y donde no quiero ni pensar lo que va a pasar.
No me gustan las fiestas, nunca me han gustado. De pequeña me detectaron hipersensibilidad en los oídos y entonces los ruidos fuertes me afectan mucho, hasta el nivel de que me duelen los oídos dos días después de eso y pues, para no pasarlo mal, prefería no ir y no joder a los demás tampoco. Pero con los años, intentaba disfrutar más y pasármelo bien.
Mañana, por esto último y porque me apetecía mucho, me voy a proponer e intentar disfrutarla al máximo sin ningún miedo.
Lo que yo no sabía es que en esa fiesta, conocería a mi cantante favorito.Continuará...
😘❤️
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Inconmensurable- Duki
FanfictionDaniela es una mujer joven que va de vacaciones de verano a Argentina con su mejor amigo. Ella sólo ama dos cosas, el trap y el fútbol. Mauro, uno de los traperos más famosos de Argentina que tras gira por Europa vuelve a su tierra de vacaciones c...