¿Quién sos cuando el frío te alcanza y no puedes respirar? ¿Qué pasa cuando el mundo te abandona? ¿Cuando no tenés ropa y te estás congelando? ¿Cuando no tenés comida y te estás muriendo? Yo no me pienso quedar acá, no me voy a dejar morir después de todo lo que pasamos.
Historias basadas en hechos reales, están llegando a un final, el mundo deja de ser mediático y las respuestas florecen en otra línea temporal, esta última parte será especial para cada uno de nosotros que acompañamos cada sentimiento atribuido a cada parte. No veía este día posible de llegar porque ni en mi imaginación ni en mis pensamientos más profundos iba a imaginar escribir un libro. Hoy con los ojos sin más lágrimas que soltar, la soga que me sujetaba hoy tiene que terminar, todos los sentimientos guardados están y sé que cuando salga de este frío infierno, podré volver a recordar cómo era estar todos los días apartando la nieve de mi cara. No pienso morir en el invierno cuando este tiempo me he quejado por encontrar una salida y sé que estoy cerca de encontrarla, no es el ártico pero en mi ático guardo nieve que me congela mi casa.
Este "hasta luego" será largo y doloroso porque es evidente que no sé cómo cerrar un libro que ha sido la única razón por la cual puedo mantenerme vivo. Ha sido una salida a lo que se pronunciaba en cada renglón de lo que iba escribiendo, cada uno de ellos tiene mil recuerdos y sentimientos que al finalizar cada parte, me iba a dormir con un bloqueo emocional sin poder comentar lo que realmente estaba sintiendo, el llorar se ha convertido en mi mejor forma de arraigar mis deseos, a veces queremos cosas que por razones naturales o sintéticas no podemos tenerlas, mis deseos no son milagros y por lo tanto, no puedo esperar a que las estrellas bajen a hacerme compañía cuando ella misma se burlaba de mis peores momentos.
No debo llorar porque está acabando, debo sonreír porque está sucediendo, esto termina pero da inicio a algo más allá de lo que he estado viviendo, cuento que mis cuentos de medianoche me siguen haciendo llorar, las gotas caen y no me dejan dormir, en mis sueños aparece de nuevo y aunque quisiera apartar, no es una película, es la vida real, y todas las noches me despierto cuando el reloj marca las 3:00 a.m, mis ojos se abren y mi respiración es agitada, la ansiedad me come las palabras y busco el retrato en cuadros con las imágenes cortadas, mi corazón no palpita con normalidad y sé que eso no debería pasar pero el sueño que me hacía descansar, es cortado por el sueño que no puedo evitar, los meses pasan y las horas se vuelven cada vez más pesadas, la obligación recae en mis traumas y olvidarlos es algo que me dictan las ráfagas de palabras que me dan las alarmas.
Físicamente mi vida se está viendo afectada y eso no me agrada para nada, el ejercicio de intentar lograr apartar la mirada me cansa, soy demasiado inocente en pensar que voy a mejorar queriendo cambiar, porque mira lector. El mundo lo veo destruido y las pinturas creativas se terminan destiñendo, por ejemplo, yo quiero vivir en los 80's, quiero regalar flores y que no las dejen morir, quiero poner música clásica y que me sigan los pasos, quiero dar un beso y que signifique más que eso, quiero que el ego deje de ser más que el amor que escondemos en nuestro corazón, quiero estar en la época donde tus decisiones eran acompañadas de madurez y aparte eran correctas desde un inicio, quiero vivir cuando en la radio la música era sana hasta en la disco, y se disfrutaba de eso, quiero la vida diferente con personas diferentes pero desgraciadamente, esta sociedad que no vive en la nieve, tiene una desgracia de mente y los estereotipos acaban con la seguridad de cada una de las personas, y las inseguridades acaban con sentimientos que eran más que suficientes.
No sé si el camino que estoy tomando es el correcto o mis elecciones están siendo maduras pero a mi pasado le digo: Sé que hay mil razones por la que no debemos estar juntos, pero estoy harto de ellas, estoy harto de todas esas razones, hay que hacer una elección, bueno, ahora te elijo, te voy a seguir, te voy a seguir a todas partes, te voy a seguir el resto de mi vida. Todo deja de tener sonido, la nieve se silencia aunque su tonalidad y coloración sea suave, cada día dolía tanto escuchar que volvía a aparecer porque sé lo que venía, el pasado me ha convertido en lo que soy hoy, por eso considero que no siempre debe olvidarse, también aprender de él nos lleva a formar tú carácter. Siento que si no hubiese pasado esto en mi vida, nunca me habría dado cuenta del valor personal que debo darme, y realmente muchas veces me culpé sin la necesidad de hacerlo, algunas penas de antaño me gritaban: "A veces siento que no tengo personalidad propia, y solo actúo en el momento, por cosas como esas, odio muchas veces mi forma de ser", y llegué a la conclusión que no, realmente no tenía la culpa.