Capítulo XI.- Round Dos

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EXT. CAMPO DE CAMPAMENTO - NOCHE

El aire seguía lleno de tensión, denso con la amenaza de Vilgax y su imponente presencia. Sin dudar ni un segundo más, Fuutaro alzó su mano hacia el Omnitrix, activándolo con un brillo verde intenso. El dispositivo emitió un sonido familiar, y en un instante, Fuutaro se transformó en 4 Brazos, el colosal alienígena de piel roja y músculos imposibles, de pie frente a Vilgax.

FUUTARO (4 BRAZOS): (gritando mientras sus puños chocan, emitiendo un sonido atronador)¡Quítense de aquí, rápido!

Con un grito de advertencia, 4 Brazos se lanzó directo hacia Vilgax, sus cuatro puños alzándose con toda la fuerza de su cuerpo masivo. El suelo retumbó bajo su peso, mientras cada paso resonaba como una explosión. Su velocidad y determinación eran imparables.

Las quintillizas, viendo la situación, reaccionaron rápidamente. Ichika, Nino, Miku, Yotsuba e Itsuki intercambiaron miradas, conscientes del peligro en el que todos estaban, pero también confiando en que Fuutaro sabía lo que hacía.

ICHIKA: (gritando a sus compañeros) ¡Vamos, todos aléjense, ahora!

NINO: (tomando la delantera, autoritaria) ¡Lleven a todos a un lugar seguro! ¡Esto no es algo que podamos manejar!

Los estudiantes, todavía en shock por la aparición de Vilgax y los androides, comenzaron a moverse rápidamente, siguiendo las indicaciones de las quintillizas. Pero en sus caras había asombro, incredulidad, y sobre todo, una nueva revelación que se extendía como el fuego entre ellos.

COMPAÑERO 1: (con la boca abierta, asombrado) ¿Fuutaro es... el héroe alienígena?

COMPAÑERO 2: (incrédulo, con ojos muy abiertos) ¡No puedo creerlo! ¡Todo este tiempo, el héroe que hemos visto en las noticias era él!

Las murmuraciones y los gritos de sorpresa llenaron el aire mientras los estudiantes se apresuraban a alejarse del lugar de la batalla. Las quintillizas tomaban control de la situación, asegurándose de que todos estuvieran a salvo, mientras no podían evitar mirar hacia atrás, donde Fuutaro - ahora 4 Brazos - se enfrentaba al mismísimo Vilgax.

VILGAX: (con una sonrisa cruel mientras esquiva el primer golpe de 4 Brazos) ¿Es esto lo mejor que puedes hacer? Eres más patético de lo que imaginaba.

4 Brazos lanzó un segundo golpe, esta vez impactando el aire frente a Vilgax, que retrocedía con facilidad, burlándose de cada ataque. Pero Fuutaro no se detendría. Cada vez que fallaba un golpe, lanzaba otro, con más fuerza, más furia, decidido a hacerle frente a Vilgax a pesar de la clara ventaja que el villano tenía.

VILGAX: (rugiendo mientras contrarresta un golpe) ¡Esta vez, no cometeré el mismo error basura! ¡Esta vez, seré yo quien te derrote y reclame el poder del Omnitrix para mí!

El choque de fuerzas era increíble. 4 Brazos intentaba mantener la ofensiva, lanzando golpes poderosos, mientras que Vilgax esquivaba con una agilidad aterradora para alguien de su tamaño. Cada vez que Vilgax contrarrestaba un ataque, las ondas de choque sacudían el suelo, haciendo que el aire alrededor de ellos se volviera más denso con la energía de la batalla.

Las quintillizas miraban desde la distancia, ansiosas pero conscientes de que debían mantener a todos a salvo. Sin embargo, sus corazones latían con fuerza. Ver a Fuutaro luchar de esa manera, arriesgando su vida por todos ellos, solo aumentaba la admiración y el miedo en sus corazones.

Miku miraba con ojos grandes, mientras su mente procesaba lo que estaba viendo.

MIKU:(susurrando, casi en un estado de asombro) Fuutaro... está luchando por nosotros...

Fuutaro 10Donde viven las historias. Descúbrelo ahora