En alguna ciudad, donde espíritus y distintos animales humanoides conviven con las personas humanas y sobrehumanas con tipos de magia distintos o parecidos. Una muchachita decente y tranquila llamada Míriam, recién graduada y lista para empezar a trabajar como secretaria, ayudando en una gran empresa al jefe de esta. Pero realmente, ninguna empresa la quería por ser una chiquilla sin experiencia previa. Busco donde se necesitaba una, pero siempre, después de una entrevista de trabajo, la respuesta era no. Busco en lugares cercanos y lejos, pero nada. Hasta que, buscando en páginas de internet encontró una empresa que buscaba a una y que no importaba si tenía experiencia o no. A Míriam le sonó increíble. Acompañado de la búsqueda, venía el contrato, solo le bastó con leer el primer párrafo para convencerse de que era lo que buscaba. No termino de leer el resto porque al final del día, todos pedían lo mismo. Quizás más adelante se de cuenta de que si era necesario.
En la entrevista de trabajo le fue muy bien, la entrevistadora era muy amable, y entre tantas preguntas una fue sobre que si leyó el contrato, Míriam mintió que si, y sin más fue contratada y que empezaría a trabajar la semana que viene.
La semana empezó y con el su primer día también. Al llegar al lugar, todos sus nuevos compañeros la saludaron muy animados y felices. Una de ellas se llamaba Charlotte, era capaz de hacer volar a todos con el manejo del viento. Era animada y guío a Míriam a su nueva oficina y le mostró todo aquel departamento gigante. Eran cuatro pisos y ella estaba en el segundo, pero en el cuarto. Había una puerta que destacaba más, prácticamente era como un portón pero más pequeño. Charlotte le dijo que después de acomodar sus cosas, tenía que ir a esa puerta a conocer al jefe para conocer su labor más específicamente.
Al terminar y subir a la oficina, vio a un hombre, flacucho no más de veintisiete años, con el pelo largo, blanco y grisáceo, piel clara y una mirada fría, con ojos grandes, unas ojeras negras y grandes, y un amarillo fucilante en sus pupilas que transmiten algún trauma. Sentado en el escritorio, haciendo una disección a una rata que parecía aún viva.
-¡¿¿QUE ESTA HA- A-ACIENDO-
Pregunto Míriam perturbada por la situación.
- ¿Que quie-¡Ah!, ¿Eres tú mi nueva secretaria, supongo, bueno..., BIENVENIDA LINDA!, perdón si te asusté, pero me alegra que viniste, ven, mira mis colecciones!, te van a encantar -
Le decía el tipo mientras guardaba su rata, y la tomaba del hombro y le enseñaba una repisa con distintas cosas, pero una destacaba. Tenía seis ojos conservados. Con curiosidad y miedo, Míriam le pregunto de donde los sacó, pero este solo contesto que solo eran de demonios que una amiga le consiguió ya que, para el, eran lindos. Míriam solo asintió dando a entender que está bien, y siguió con la explicación del trabajo y un recorrido del lugar.
Después del recorrido, el día siguió normal, al igual que la semana, fue tranquila, ayudando a recordar los horarios de reuniones y salidas de comercio, hasta que, el viernes, Charlotte y Willy, otro compañero mitad conejo. La invitaron a tomar a un bar para disfrutar un rato. Míriam no perdía nada en acompañarlos, aunque no era fan de ese tipo de bebidas. Fueron ella y cinco compañeros más, incluyendo a Charlotte y Willy, caminando y riendo. Al llegar se acomodaron en una mesa en conjunto, pero Míriam vio detenidamente el lugar, era curioso, con luces brillantes con colores vivos, mucha gente insinuandose entre si con quizá una intención sexual, y la gran mayoría esperaba algo... O a alguien. Míriam solo respiro profundo y se dijo "es solo tu imaginación". Pero se arrepentiría después de eso al bajar la intensidad de la luz, y un presentador anunciaba a la estrella de la noche, "Funny".
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Cuentos o Historias Que Se Ocurren
Science FictionDistintos cuentos que pienso ir publicando y de vez en cuando, subir dibujos relacionados con estos.