Max
Antes le pertenecía a la nada, pero ahora le pertenezco a un par de ojos marrones. Emma lo es todo, creí que era una exageracion pensar que una persona podia cambiar el mundo de otra con solo una sonrisa, bueno. Ella cambió mi mundo con solo mirarmeEstoy seguro que si el tiempo regresará me enamoraría de ella, una y otra vez. Me enamoré de Emma el mismo día en que la conocí, no fue al instante, debo admitir, pero no pasó mucho tiempo para que su sonrisa se volviera mi dueña
Alguna vez pensé que nunca confiaría en alguien más, pensé que mi capacidad de amar se había roto. Solo pensé, porque caminaría a su lado con los ojos cerrados, porque ahora estoy enamorado.
Max
*inserta foto del amanecer*
Hay tantas cosas maravillosas en este mundo, primero tú y después este amanecerLe mando el mensaje antes de guardar mi móvil
—Wow, siendo sincero no creí que fuese a resultar —me dice Robert apareciendo tras de mí
—Todo esta yendo bien, el único problema es que esta yendo demasiado lento, y tiempo es lo que menos tengo —menciono
—Deberías hablar con Emma sobre…eso
—Te recuerdo que fue la misma Sara que me pidió que no le dijera nada. Si ella me lo dijo es por algo —lo miro de reojo
—Bueno…aún tienen dos meses —Robert palmea mi hombro adelantándose.
El resto del día pasa como los demás, trabajo con los chicos como de costumbre, hasta que el reloj marca las seis de la tarde.
Si por Fabricio fuera me obligaría a entrenar día y noche.
Reviso mi celular y el único mensaje que encuentro de Emma me alarma
Pequeña
Llámame cuando termines de entrenarLe marco enseguida, ella tarda en contestar, pero lo hace
—Emma, ¿qué sucede? ¿Te encuentras bien? —pregunto al instante
—Estoy bien Max —responde rápido—, tengo algo que decirte, y no creo que sea necesario que vengas a la residencia
Frunzo el ceño
—¿De qué se trata? —le pregunto
—…creo que…deberíamos terminar con esto —suelta en un susurro
—¿Qué?
Mi corazón retumba en mis oídos
—Me he encontrado varias veces a Harry en la universidad y no ha intentado acercarse, seguramente Catherine tampoco intentará acercarse a ti. Fuera de eso…las cosas no van muy bien…creo que ya no es necesario…
—¿Qué insinúas Emma?
—…deberíamos de dejar de…fingir
—¿Fingir qué? Maldita sea, no hemos fingido nada Emma —digo con la respiración hecha un desastre
—Ves, esto te está confundiendo Max. Estoy bien estando sola, me encanta estar sola, te lo dije. Yo no quiero…