Una Oportunidad Más, en esta vez las cuentas se saldrán como hace años debió de haber sido, más de 100 años lo espero, y ahora era hora de verse una vez a la cara de nuevo.
Reconocer eso ojos lavanda gentiles que tanto anhelo alguna vez en las remin...
Quiero meter un ship, pero siento que si lo meto me queman viva.
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Una mañana fria en la caotica y concurrida cuidad de Tokio apuntaba a un día normal sin mucha complicaciones aparentes, la temporada de invierno habia dado apertura a la cdremonia espíritul quw apuntaba llevarse ese mismo dia antes del nuevo año, otros mientras se la pasan en reuniones o fiestas, para las familias Tomioka, Tengen, Kamado, Agatsuma, Shinazugawa, Hashibira y Rengoku esto era claro que no se hacía, porque tenían un deber más importante con la gente y com el templo Ubuyashiki
Pero primero cabe resaltar antes de explicar la festividad, darle la bienvenida a quien sería el nuevo joven que por primera vez en su vida participaría en este festividad de apertura y de fin; Giichi Tomioka.
Giichi [義一] Tomioka es un caso muy particular en cuestión de participación por tener muy corta edad y tener que ejercer aquella danza, es un niño muy tímido pero cálido, una mirada profundamente tierna y que para los estándares de belleza juveniles no tenía nada que envidia claro está por ganancia y génesis fuertes los Tomioka siempre se caracterizaron por miradas tiernas cuando estaban felices, adornadas con azules marinos y cabellos obscuros azabache que los adornaban y hacían resaltar por su belleza a pesar de ser muy humildes y poco vanidosos.
El no era el único descendiente de la familia Tomioka eso era muy claro, Tsutako su hermana mayor por cuestiones de estudios no se pudo dar el tiempo para practicar y estar en el evento en lugar de su hermano, y para ser sinceros ese "no tener tiempo" también se le podía atribuir a un noviazgo algo tapado que tenía fuera de la vista de muchos, así que no la podíamos culpar, se supone que los hijos mayores toman la responsabilidad de la tradición a que se pueden dar una idea.
Giichi perteneciente al club de natación juvenil, alumno de primaria [11 años] y amigo eterno de dos compañeros suyos; Makomo Ito y Sabito Sato y miembro más joven de la familia Tomioka, familia de clase media alta y perteneciente ahora mismo en uno de los pocos miembros capacitados para la apertura de año en cuestión de danza en el templo Ubuyashiki y Sagiri.
La tradición de las danzas de formó por ancestros no tan lejanos de pocas familias con "motivo de reserva cultural y tradición", se dice que aquellas danzas se hace para festejar un nuevo año de vida y seguridad contra los malos espíritul, se dice que ayuda para que entes malignos no posean a los habitantes y que estos puedan seguir con vidas pacíficas y armónicas un día más, o bueno, es lo que entendió cuando le explicaron el porque tendría que danzar durante toda una noche al amanecer sin descanso. Loco, ¿no?.
— Ya no tarda en llegar la camioneta por nosotros, Giichi -Habló una voz femenina mientras arreglaba una bolsa destinada al trasporte del vestuario ceremonial.
— Ya voy nee-san -Hablo el pequeño joven de ojos azul marino mientras bajaba a las prisas por las escaleras.
Hoy era el último día del año, por ende esa mismo día tendrían que recorrer media cuidad para llegar al templo donde el evento se llevaría acabo, se requería ir temprano para terminar de organizar el evento antes de que este mismo iniciará, por ello desde primera hora tendría que salir de casa, para la fortuna de Giichi, ese día faltar a la escuela y al club estaba justificado por motivo cultural así que no habría ningún problema.