I choose my poison and it's you -「Khr」R86『Reborn x Haru』

Capítulo I

Me libero de toda culpa si da cringe... es mi primera vez intentando algo así y también escribiendo escenas +18

Además tengo esto desde hace rato xd si, no tenía planeado publicarlo, pero no perdía nada

Vuelvo y repito, si no es de su agrado, simplemente no lo lea (nun)9

¡En fin! Por favor, adelante con la lectura♡

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Lamió sus labios con una sonrisa cargada de muchas emociones, mientras se encargaba de delinear su miembro en la húmeda entrada de su hermosa Haru, la cual estaba completamente desnuda y muy dispuesta para él.

"Ah, mierda", pensó, era un milagro y el pecado al mismo tiempo.

Y lo estaba amando, si tenía la posibilidad de profanar hasta lo más profundo de su precioso cuerpo, poco le importaba quemarse en las furiosas llamas del infierno, porque la deseaba con locura.

Sin esperar más tiempo, se presionó y de una estocada se adentro en ella, al escuchar su gemido creyó oír cánticos angelicales.

Con un firme agarre en sus caderas, comenzó a golpear sin compasión su interior. — Dentro se siente tan bien y muy... muy caliente.

— Ugh... mh~mngh. — Reborn levantó una ceja sin lograr entenderla, claramente, pues Haru tenía puesta una mordaza, la cual venía con los juguetes que había comprado hace un tiempo.

Negó, mientras sonreía de lado, luego tomó el control del pequeño vibrador que le había puesto en el trasero a la mujer, aumentando la intensidad.

— ¡Mmng~! — gimió alto, liberando fuertes espasmos que hacían que su cuerpo entero, temblara de placer.

Sonriendo de manera retorcida, sentía que ese podía ser su mayor éxtasis, al ver lo que había logrado hacer con ella, se acercó a su delicado cuello donde se encargó de dejar marcas de besos, hasta llegar a su oreja y mordió su lóbulo. — Te encanta, ¿No es así? Lo hago mejor que él, estoy tocando lugares que Gianluca ni siquiera es capaz de imaginar, ¿Cierto?

Llevaba años tratando de entender, porqué Haru seguía con aquel tipo, quien era su esposo, aunque dejaba mucho que desear como tal, es un papel que le quedaba demasiado grande.

Era el hombre más patético que podía existir, si bien Reborn es mucho más joven, creía ser mejor que él, que era incapaz de siquiera hacer feliz a la preciosa mujer con la que compartía su vida.

En su lugar, prefería buscar placer en esa cualquiera que trabajaba como su secretaria.

— Haru, es tan hermosa... Gian realmente es un imbécil que no sabe valorar lo que tiene. — susurró, sobre el oído de la mujer.

Levantó la mirada hacia ella, viendo las pequeñas lágrimas que salían de sus bellos ojos.

Finalmente soltó la mordaza y le permitió hablar.

Haru lo miro de manera indescifrable. — Su‐suelta mis manos. — por supuesto, había unas bonitas esposas acolchadas en sus muñecas, amarrándola a la cama. — Si te detienes... te perdonaré, no me enojare, solo... para de una vez, Reborn.

Él sonrió de lado y negó. — ¿Por qué debería? Me gusta, y sé muy bien que te está gustando... entonces, ¿Pará qué detenerse? — llevó su boca a uno de los lindos pechos de la mujer, lo lamió, chupó y mordió con hambre.