Tinte Verde Corazón Oscuro (Izuku Yandere X Malereader)

Tinte Verde, Corazón Oscuro.

El hospital estaba envuelto en un silencio inquietante. Las luces fluorescentes parpadeaban tenuemente sobre los pasillos vacíos, como si el edificio mismo estuviera reteniendo la respiración. Todoroki, Bakugo, Ochako y los demás héroes esperaban en una pequeña sala de espera, con rostros marcados por la preocupación y la fatiga. Habían pasado horas desde el rescate, pero las secuelas del encuentro con Izuku Midoriya aún se sentían frescas en sus mentes.

Dentro de una habitación privada, ___ descansaba, recuperándose de las heridas tanto físicas como emocionales. Su cuerpo aún estaba marcado por las cicatrices de las cadenas y los moretones, pero su mente estaba aún más herida. Los recuerdos de los toques invasivos de Izuku, sus susurros obsesivos y el miedo constante no se desvanecerían tan fácilmente.

A su lado, Todoroki permanecía en silencio, vigilando cada respiración de ___. Sus pensamientos eran un torbellino de emociones: alivio por haber rescatado a su amigo, culpa por no haberlo hecho antes y una profunda tristeza por lo que Izuku se había convertido. No sabía cómo abordar lo que había sucedido, pero sabía que, para ___, cada momento era una batalla para olvidar.

“Sé que estás despierto”, murmuró Todoroki, rompiendo el silencio. “No tienes que decir nada. Solo… quiero que sepas que estamos aquí para ti.”

___ abrió lentamente los ojos, su mirada vacía, como si estuviera mirando a través de él. “Gracias,” susurró con voz quebrada. “Pero no sé cómo… cómo seguir después de todo esto. Izuku… lo veía como un amigo. Nunca pensé…”

Todoroki asintió, su mirada fija en el suelo. “Ninguno de nosotros lo vio venir. Pero lo que él hizo no está bien. No tienes que perdonarlo. Nadie te va a presionar para que lo hagas.”

Mientras tanto, en otra ala del hospital, Izuku estaba encerrado en una habitación aislada, bajo constante vigilancia. Había sido sedado después del enfrentamiento para evitar que se lastimara a sí mismo o a los demás. A pesar de su comportamiento errático y sus ataques, los médicos habían determinado que aún era capaz de responder a estímulos, lo que lo hacía potencialmente peligroso.

Izuku despertó lentamente, sintiendo una opresión en su pecho. Estaba atado a la cama, sus manos y pies asegurados con correas fuertes. Miró alrededor de la habitación con ojos vidriosos, sin reconocer el lugar al principio. Lentamente, los recuerdos comenzaron a inundarlo: el almacén, ___, los héroes… y el doloroso vacío en su pecho al darse cuenta de lo que había hecho.

"¿Dónde…?" murmuró, pero su voz apenas era un susurro.

Una enfermera entró, manteniendo una distancia cautelosa. “Estás en el hospital de la U.A., Midoriya Izuku. Estás aquí bajo custodia. Los héroes querían darte la oportunidad de recuperarte, pero estarás vigilado todo el tiempo.”

Izuku no respondió de inmediato. En cambio, su mirada se centró en sus manos atadas y en las venas verdes que corrían por debajo de su piel. Recordó lo que siempre había representado su cabello: un “tinte verde” que siempre había sido un símbolo de esperanza y crecimiento. Pero ahora, sus pensamientos eran diferentes, oscuros. Todo lo que sentía era la fría realidad de un “corazón oscuro” que lo había llevado por un camino de obsesión y desesperación.

Los héroes y sus profesores se reunieron para discutir lo sucedido. Aizawa, con una expresión grave en su rostro, tomó la palabra. “Midoriya Izuku fue uno de los mejores de nuestra clase, un símbolo de lo que significaba ser un héroe. Pero incluso los corazones más puros pueden oscurecerse si permitimos que la obsesión y la desesperación los dominen.”

Bakugo, que había permanecido en silencio hasta ahora, finalmente habló, su voz llena de furia reprimida. “Nunca vi a ese nerd como alguien que se desviaría tanto. Pero también es culpa de todos por no haber visto las señales. Siempre creímos que era demasiado bueno para caer… pero estaba escondiendo un corazón que se volvía más oscuro con cada día que pasaba.”

Ochako se secó una lágrima de la mejilla. “Todos lo amábamos de alguna manera. Pensamos que su corazón era puro. Pero quizás… nadie puede ser completamente puro. Todos llevamos algo oscuro dentro.”

La Resolución de ___

En su habitación, ___ continuaba luchando con el torrente de emociones que lo invadían. Recordó los momentos que compartió con Izuku antes de que todo se torciera; los momentos en los que pensó que él era un verdadero amigo. Pero ahora, esas memorias estaban teñidas de un verde enfermizo, un tinte de lo que alguna vez fue y lo que se había convertido.

“Quizás nunca lo entendimos del todo,” susurró ___, mirando a Todoroki. “Pensábamos que su cabello verde representaba algo bueno, algo puro. Pero el verde también puede representar celos, obsesión… un corazón que se vuelve oscuro.”

Todoroki asintió, tomando la mano de ___ con suavidad. “Pero eso no significa que todo el mundo sea así. Hay luz y oscuridad en cada uno de nosotros. Y a veces, la línea entre ellas es más fina de lo que pensamos.”

___ cerró los ojos, asintiendo lentamente. “Tengo que encontrar la manera de seguir adelante. Quizás nunca olvide lo que Izuku me hizo, pero no puedo dejar que su corazón oscuro consuma el mío.”

Mientras ___ comenzaba su largo camino hacia la recuperación, los héroes reflexionaban sobre las lecciones que habían aprendido. Izuku, una vez visto como el futuro del heroísmo, ahora era un recordatorio vivo de que incluso los héroes más brillantes podían caer. Su "tinte verde" había sido una fachada que ocultaba su "corazón oscuro".

La historia de Izuku y ___, ahora conocida como "Tinte Verde, Corazón Oscuro", se convirtió en una advertencia para todos los héroes en entrenamiento. Un recordatorio de que el camino de un héroe no siempre es recto, y que los verdaderos monstruos no siempre están afuera, sino que a veces crecen dentro de nosotros mismos.

Y así, con el tiempo, los corazones rotos comenzaron a sanar, y la luz comenzó a brillar de nuevo, aunque con una nueva comprensión de la fragilidad de la bondad humana y la fuerza de la oscuridad que cada uno lleva dentro.

Fin

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Bueno la verdad que el final me dio un poco de vergüenza ajena escribirlo, pero a pesar de eso, me gustó como desarrolle la historia, creo que fue mi mejor historia hasta ahora.

¿Y tu opinión sobre la historia cuál es?

Muchas gracias por leer mi historia.