Rosas y Espinas |《Lookism》|

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La cuenta de Jiho fue recuperada por los protagonistas de la historia, los estafadores depositaron mucho dinero en el tiempo que estuvo en posesión de estos. Por suerte se pudo devolver la mayor parte del dinero.

Pero luego de ese día Hayden pudo notar esa ausencia acosadora detrás de ella. Jiho dejo de asistir a la escuela.

Y también el nombre de Burn Knuckles comenzó a resonar en las calles, cosa que ponía en un constante estrés a la pelirroja debido a que ahora solo los escuchaba en todos lados. Hasta en boca de los mas cercano a ella.

-Necesito un cigarrillo- A penas dijo esas palabras, jalo a Vin y Mary hacia la parte de atrás del patio de la preparatoria -Saca uno, necesito tabaco- Casi que le exigía a Vin Jim uno.

-¿Y a ti que te pasa?-

-Solo dámelo y ya- Ambos chicos miraron de una forma preocupada, pocas veces la vieron así y generalmente fueron las veces en las cuales se estresaba por los exámenes.

Y claro que en un momento así ni Mary podía llevarle demasiado la contraria -Ahora si ¿Qué te paso pelirroja?- Mary se apoyo al lado de ella, agitando su mano para apartar el humo.

-Se me activo el pinkisentido.- La pelirroja puso saber de inmediato que no le entendieron a la primera debido a su rostro -¿En serio? ¿My Little Pony?-

-¿El punto? Hayden no te voy a entender si sales con esas cosas-

-Te voy a tener que sentar a ver la comiquita- Ella tomo aire mandando el cigarrillo a saber dónde porque lo termino lanzando -Tengo un muy mal presentimiento, estoy bastante segura de que algo va a pasar-

-Con lo rara que estás cualquier cosa es creíble- Vin Jim, con lo raro que pueda sonar, acarició la cabeza de Hayden -Vamos al arcade luego de clases, eso tal vez te cambie la cara-

Claro, tan raro fue el gesto que tanto Mary como Hayden se alejaron un poco mirando de reojo al chico.

-¿Segura de que no se metió nada raro?-

-Estoy completamente segura, la vigilo todo el día como para dejarlo drogarse-

Eran palabras que aparentaban se dichas en susurros, como si el de gafas no las estuviera escuchando en lo absoluto.

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Durante la noche suelen ocurrir crímenes. A veces se suelen limitar a solo unos robos menores, sean estos de adolescentes problemáticos o adultos idiotas.

Pero nada vuelve un día de trabajo más interesante que un accidente bastante sospechoso.

-Detective, deje que yo me encargue de esto.- Garam hizo acto de presencia en la escena por mera casualidad, su jefa lo había obligado mejor dicho.

Pero al parecer las casualidades de la vida no eran suficientes.

-¿Unico testigo?- Se acercó a un muchacho cuyo rostro supo reconocer, su jefa lo tenía en la mira desde hace un rato -Tranquilo chico, no te voy a hacer nada.-

Era momento de jugar al policía bueno por un rato. Algo no terminaba de cuadrar.