La Travesía del Pequeño Elfo. - Hyunlix.

Aurora.

Felix estuvo a punto de pellizcarse alguna parte del cuerpo cuando miro hacia el cielo, estaba en la parte más alta del castillo, recostados en una manta de felpa mientras tenía la espalda apoyada en el pecho de Hyunjin quien lo rodeaba con los brazos.

— ¿Te gusta?

— ¿Bromeas? Es... espectacular... hermoso... mágico —no encontraba palabras para describir las auroras boreales sobre ellos — ¿Cómo paso esto?

— ¿Científicamente? —Felix asintió por alguna razón —es causado por la interacción entre el viento solar y el campo magnético de la Tierra.

—Wow... —Hyunjin sonrió al ver a Felix con la boca abierta, ciertamente él no estaba menos asombrado, pero ver la cara de asombro de Felix lo era todo, estaba encantado de regalarle esta primera vez viendo algo tan hermoso como las auroras boreales — ¿sabes porque tienen esos colores? —sus intensos ojos chocolate lo miraron casi suplicantes de más información.

—Los colores dependen de los gases que están siendo estimulados, el verde —apunto la larga estela de aquel color sobre ellos —, es causado principalmente por las colisiones con el oxígeno a altitudes más bajas. El rojo y el rosa se producen a mayores altitudes por la estimulación del oxígeno.

— ¿Y qué pasa con el morado y el azul? —apoyo su cabeza en el hombro de Hyunjin mientras lo observaba mirar hacia el cielo captando los colores de la aurora haciendo eco en sus ojos negros.

—Bueno esos colores son resultado de las colisiones con el nitrógeno.

—Hermoso e inteligente, eres el paquete completo, Hwang —le robo un intenso beso mientras las luces de colores en el cielo los iluminaban. — ¿Debería hechizarte yo esta vez para que jamás vayas a dejarme? —bromeo.

—Hablando de eso... —Hyunjin se volvió serio —Felix necesito preguntarte algo.

—Me estas asustando. No me digas que hiciste todo esto para que no doliera tanto el hecho que me vas a terminar, porque la respuesta es no, me voy a pegar como una sanguijuela a ti, no te estoy dejando, no, eso no va a pasar.

Hyunjin se rio, al parecer le había pegado parte de su dramatismo a su rubio Elfo —No voy a terminar contigo, Yongbokie. De hecho es todo lo contrario —metió la mano al bolsillo de su chaqueta sacando una cajita de felpa color rojo.

— ¿Eso es...?

—Ponte de pie por favor —Felix lo hizo aun confundido mientras las luces verdes iluminaban el guapo rostro de Hyunjin, luego lo vio apoyar una rodilla en el suelo mientras levantaba la otra, típica posición de príncipe —Todo pareció jugar a mi favor para hacer esta importante propuesta. Llevo pensándolo por menos pero quería que fuera realmente especial.

—Cualquier momento contigo es especial, Hyunjin.

—Lo sé, pero sabes que cuando se trata de ti no quiero dejar ningún detalle al azar. Entonces averigüé, investigue y como un verdadero milagro de la naturaleza las auroras boreales podrían ser vistas a partir del 15 de septiembre y no desde el 22 o 23 que es lo común. Fue mi señal, tal como el día en que te vi por primera vez. No era mi turno de trabajar aquel día pero un montón de pequeñas coincidencia me llevó hacia ti, te vi y supe que serias para mí. Y ahora es importante, es la decisión final de algo que espero tu también desees y es por eso que quiero preguntarte algo.

—Escucho atentamente, hermoso príncipe.

—Lee Yongbok Felix. ¿Me harías el increíble honor de convertirte en mi esposo? —saco el anillo de la caja, una fina pieza de oro blanco con dos piedras preciosas en medio, una celeste y la otra blanca.

—Sí, Hwang Hyunjin, si y mil veces si —los ojos de ambos estaban llenos de lágrimas cuando Hyunjin coloco el anillo en su dedo y luego se puso de pie arrastrando a Felix hacia el para besarlo —, no estoy soñando ¿verdad?

—No, mi ángel. Es real.

—Muy real. —Se abrazó fuertemente de Hyunjin. —un futuro señor Hwang... wow, ¿Cómo superar este regalo cuando sea tu cumpleaños?

—Podrías dejarme usarte de lienzo, completamente desnudo y después follar sobre la pintura.

—Creo que puedo hacer eso —sonrió sin caber dentro de su felicidad. —Gracias por amarme tanto, Hyune.

—Siempre ha sido un placer, Yongbokie.

Fin.     

Nota: Soy consiente que fue muy cortito, pero creo que cumple con el objetivo de ir siguiendo el juego que Hyunjin preparo para Felix.

Ahora respecto a las Auroras Boreales, en efecto son mas visibles desde fines de septiembre a noviembre en el hemisferio norte, muuuuuuy al norte, pero bueno, es ficción y sentí que era un mundo lindo final para toda esta travesía.

Nuevamente espero les haya gustado aunque fuera corto y posiblemente le faltara un sinfín de detalles. Estoy en una especie de bloqueo de escritora y esto ayudo un poco a salir de ello.