I LOVE YOU, BOY | YOONMIN

17

Capítulo 17: satisfacción

Yoongi despertó casi al alba, su cuerpo ardiendo con el calor característico de su celo. La luz tenue del amanecer apenas iluminaba la habitación, pero fue suficiente para que sus ojos se posaran en el cuerpo a su costado. Observó la espalda fina y las caderas anchas de Jimin, quien yacía dormido a su lado. Sin poder evitarlo, sus manos comenzaron a moverse solas, recorriendo el camino familiar de la cintura y sus muslos, sintiendo la suavidad de su piel bajo sus dedos.

Un beso fue dejado en el hombro del omega, un beso que se intensificaba con cada segundo que pasaba. Los besos se convirtieron en una lluvia sobre la piel de Jimin, quien comenzó a moverse ligeramente bajo el toque del contrario. El aroma de Yoongi estaba envolviendo a Jimin, llenando sus sentidos y despertando algo profundo dentro de él nuevamente.

El menor suspiró cuando los besos llegaron hasta su mentón, y luego sus labios fueron capturados en un beso lento pero necesitado. Yoongi se movió con cuidado, sabiendo que no podían hacer demasiado ruido y arriesgarse a despertar a Jihoo, quien aún dormía plácidamente cerca de ellos.

Con una facilidad que hablaba de su fuerza, Yoongi levantó a Jimin, subiéndolo a horcajadas sobre su propio cuerpo. Jimin se aferró a sus hombros, jadeando cuando sus cuerpos se tocaron por completo. El contacto era electrizante, una chispa que volvía a encender la necesidad en ambos.

Sus ojos se encontraron, llenos de deseo y una comprensión silenciosa. No había palabras necesarias entre ellos en ese momento; sus cuerpos hablaban por sí mismos. Jimin se inclinó hacia adelante, profundizando el beso mientras sus manos se enredaban en el cabello de Yoongi.

El cuarto estaba lleno del suave sonido de sus respiraciones entrecortadas y los ocasionales jadeos que escapaban de sus labios. Jimin podía sentir el calor de Yoongi impregnando su propia piel, una sensación que lo hacía temblar de anticipación.

Las manos del alfa descansaban firmemente en las caderas de Jimin, apretando suavemente ante la descarga de sensaciones que recorrían su cuerpo. Sus labios se movían en un ritmo sincronizado, explorándose mutuamente, conociéndose de nuevo en la intimidad de la madrugada.

Yoongi, sintiendo el calor creciente entre ellos, movió las caderas de Jimin, haciendo que el omega jadeara en medio del beso. El sonido era suave pero cargado de necesidad, y Jimin no dudó en bajar su mano hasta la longitud de Yoongi, acariciándola con timidez. Ambos sabían lo que Yoongi buscaba, y Jimin estaba listo para entregarse por completo.

Con cuidado, alzó las caderas de Jimin, posicionándolo sobre su longitud. No quería dañarlo, así que fue meticuloso en sus movimientos, asegurándose de que Jimin estuviera cómodo. Cuando comenzó a bajar, pudo sentir a Yoongi llenándolo completamente, la sensación lo hizo aferrarse a los hombros del alfa, buscando apoyo y estabilidad.

Yoongi, sintiendo la estrechez y calidez de Jimin, comenzó a moverse lentamente, embistiéndolo desde abajo. Subía y bajaba a Jimin por su longitud de manera lenta pero profunda, haciendo jadear al omega en cada embestida.
Jimin podía sentir a Yoongi salir y entrar por completo, cada empuje enviando ondas de placer a través de su cuerpo, haciéndolo jadear en alto. La sensación de ser llenado repetidamente, estaba enloqueciéndolo.

—Jimin~, tienes que hacer silencio o despertarás a Jihoo—susurró Yoongi con voz ronca, su respiración pesada y controlada.

Las manos de Yoongi se aferraron con fuerza a la cintura del omega, manteniéndolo firmemente en su lugar mientras sus cuerpos se movían en sincronía. Cada gemido ahora contenido de Jimin llegaba directo a los oídos de Yoongi, alimentando su deseo. Eran gemidos suaves, casi tímidos, pero cargados de una intensidad que hacía que Yoongi deseara más.