Templars of silver and faith o simplemente Templars va a ser básicamente un remake o un proyecto más constante y serío qué Rankers Emperador, mostrando una historia mejor planteada y estructurada, manteniendo ciertos eventos qué se planearon en un i...
Hace muchos años atrás, hacé 237 años más exactamente, un evento de escala divina ocurrió en un sitio qué solía ser en él pasado una tierra fértil y llena de la más pura vida y de los animales más exóticos, un evento lo suficientemente grande cómo para acabar con todo eso en un parpadeó
Año 1132
Un gran y extenso ejército sé extendía a lo largo de un bastó terreno recubierto de vida, un ejército ensamblado a basé de las aberraciones más perversas y malignas que pudieron engendrar las entrañas del averno, un ejército qué su mera presencia lograba hacer qué él ambiente fuera más pesado, que las plantas y vida vegetal marchitaran, qué las criaturas vivas huyeran para no ser devoradas, al frente de ése enorme ejercicio había una figura claramente más grande, corpulenta y increíblemente gorda y fétida, con 2 bocas, una en su cabeza y otra en su estómago, ambas desprendían un terrible olor qué era capaz de marchitar árboles qué habían resistido la presencia de el ejército de demonios qué había presente, contaba también con una mandíbula asquerosamente grande y extensa, en su interior no había la más mínima luz, como sí de tragarse el sol en interior de está criatura no emitiría la más mínima luz
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Al frente de esté ejército de criaturas "bendecidas" por uno de los 7 pecados capitales se encontraba un hombre, un simple humano aparentemente normal cubierto por prendas y telas blancas por todo su cuerpo, qué lo envolvían y protegían de cualquier viento helado o caluroso, un hombre de piel morena y largos cabellos cafés con una barba prominente del mismo color en su barbilla, esté hombre miraría al ejército de frente y sin ningún temor, esté hombre avanzaría al frente y con lentitud iría caminando a pasos firmes y seguros, a pocos metros de él pecado de la Gula, Beelzebub, él hombre hablaría
-Escuchenme con atención, pueden irse de esté lugar y dejar de causar más destrucción en éste lugar...
Dijo él hombre mientras no parecía intimidado por la presencia de demonios qué posiblemente contaban con poderes más allá del humano promedio
Beelzebub quedó en silencio para después con una voz en extremo distorsionada y múltiple, reiría con fuerza, mientras sus mandíbulas superiores se extendían de Izquierda a derecha para de él fondo de su boca saliera lo qué parecía ser la cabeza de un elefante en estado temprano de putrefacción aunque con la diferencia de tener un extraño parecido humano qué resultaría espeluznante para cualquiera, en cuanto está cabeza salió ligeramente de las fauces de Beelzebub, las mandíbulas putrefactas del elefante se movieron para hablar
-Dime humano, ¿Que te hacé pensar qué un ser tan insignificante cómo tú tiene él derecho dé atreverse a intentar retenerme a mí y a mí súbditos?
Dice Beelzebub mientras parece observar de una forma extraña al hombre cómo sí en cualquier momento pudiera hacer un acto impulsivo de cualquier tipo
