c e l o s o [dani olmo & jules kounde]

[único]

A Jules le gusta cuando Iñigo abraza a su alfa... lucen tan sexys.

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La habitación del hotel estaba en silencio, eso porque Jules estaba solo. No le importaba mucho compartir en este momento, ya que tenía algo más por hacer en mente. Bueno, en su celular en realidad. 
Su mirada vaga en cada imagen que se publica del partido. 

El "#Dani Olmo" es lo que está recorriendo, sus manos pasan por la pantalla hasta detenerse en lo más interesante. Su alfa con otro alfa. 

La foto de Iñigo y Daniel le resulta sumamente atractiva, se muerde el labio inferior cuando lee los comentarios que dejan los internautas. 

"Dos alfas juntos, es tan caliente. Que se besen." 

Se ríe bajito ante la alocada imaginación que llega a su mente, nunca le ha resultado atractivo Iñigo, pero pensar en dos alfas juntos es algo... excitante. No para hacer un trío, más bien esos dos entre ellos. 
Se pregunta mentalmente si Dani se dejaría ser... levanta la mirada cuando ve al español ingresar por la puerta, con una mochila que baja a un lado de la cama a su lado. Jules sonríe de lado un poco coqueto. 

—¿Todo bien? —pregunta Olmo al notar la atención del francés puesto en él. 

—Te tengo una pregunta... —dice con suavidad, llega al borde de la cama donde se encuentra el español mirándolo con atención. —Si por a o b motivo... te gustasen los alfas, ¿Iñigo sería una opción para ti? —pregunta con cuidado. Daniel frunce el ceño. 

—¿De qué hablas, Jules? —el alfa está confundido, la sonrisa de Moreno se agranda y le muestra la foto de ellos dos y después entra a la sección de comentarios. 

—Me los imagino a ambos juntos, se ven realmente bien. —dice con emoción, misma que el español no comparte. Su alfa gruñe en sus adentros, ambas personas tienen ideas distintas de la imagen. 

—¿Te gusta Iñigo? —pregunta con el ceño fruncido. 

—A mi no me gusta, pero a ti... ¿te gusta? —pregunta nuevamente. Jules parece reacio a comprender la reacción negativa del alfa. 
Dani gruñe en tono bajo. 

—¿Por qué estás pensando en otros alfas cuando estás conmigo? 

Jules se sorprende ante la brusquedad repentina entre las palabras y que el español haya tomado sus trenzas de pronto. Jadea baja ante el repentino dolor. 

—¿Crees que voy a permitir que siquiera pienses en otro alfa? Yo soy tu alfa e incluso si piensas en que puedo estar con Iñigo, me molesta. Yo solo quiero follarte a ti, no quiero saber de nadie más. —el enojo en la voz de Dani era notorio. Se agachó a la altura del rostro de Jules y unió sus labios, demandando la total sumisión del francés, quien gimió complacido cuando Dani lo terminó recostando en la cama y posicionándose encima suyo. 

—Daniel... —murmura apenas y el alfa deja sus labios. Dejándolo respirar correctamente, el alfa mete sus manos debajo de su playera. Directamente a presionar sus pezones. Se mete entre sus piernas con facilidad, de la misma forma que llegó a su vida. 

—Ese es el nombre de tu alfa, Jules... que ni se te ocurra volver a pensar en otro mientras yo esté contigo. 

Jules jadea cuando sus pezones son atacados por la boca del español, las manos blancas contrastan con su piel, pellizca y muerde de forma intercalada. Los llena de saliva y él siente su bajo vientre retorciéndose en un cosquilleo de sumo placer. 
Aprieta con sus muslos al alfa que está entre ellas, Daniel lo vuelve a besar mientras sus manos siguen masajeando sus pectorales, simular embestidas por sobre sus ropas aún puestas y lo desespera.