†Enamorada de la muerte† [Nico di Angelo]

La primera vez que lo vi...

Soundtrack~ This is war- 30 seconds to mars.

Malcolm y yo corríamos entre los griegos y los romanos, matando a esos nacidos de la tierra, mis espadas gemelas degollaban a esas criaturas y los boomerangs del rubio igual.

-¡Ariadna allí esta Will!- dijo Malcom señalando dos figuras corriendo esquivando golpes y ataques, el pelo rubio de Solace se agitaba frenéticamente, estaba acompañado por ¿Di Angelo?

William estaba completamente ido de la batalla, corrimos hacia él y lo empujé a tiempo para que una roca no le volase la cabeza.

-WILLIAM CONCÉNTRATE- le grite al hijo de Apolo.

-Ariadna no me llames William, necesitamos que nos cubráis, queremos llegar donde Octavio- dijo señalando a un romano rubio que parecía ser el líder.

Malcom y yo nos miramos y asentimos y empezamos a matar a los enemigos que seguían a nuestros amigos.

No sé cuánto tiempo paso, pero escuché una explosión y yo y mi amigo nos giramos, ¿el romano acaba de salir volando? Y se ha estrellado contra el Argo II.

- Malcom... ¿no estaba Valdez en el barco aún? -pregunté preocupada.

Vi como el rubio asentía asustado y ahí fue cuando me derrumbé, en el tiempo en el que Valdez estuvo en el campamento fue un gran amigo, yo ayude en la construcción del barco y siempre nos hablábamos en español.

Todos empezaron a vitorear, la guerra, había acabado, Gaia había sido derrotada con éxito.
Pero a que precio, muchas vidas se habían pedido aquí hoy, entre ellas la de un héroe, Leo Valdez, o eso creía yo.

Malcom y yo nos abrazamos, deje al lado mi orgullo de hija de Ares y llore en el hombro de mi amigo, otra guerra más... Mas vidas pérdidas.
Familias destrozadas, víctimas... Esto era horrible, no entendía porqué a mis hermanos les gusta tanto.

Vi como Will se acercaba a mi y corrí a abrazarlo, él era para mí como un hermano mayor, él fue el único voluntario junto con Luke Castellan, que quería ir a buscarme a mi país, y se lo agradezco.

-Ya esta... Todo ha pasado Ari, estamos vivos- dijo acariziando mi espalda. Yo cerré los ojos intentando retener las lágrimas.

Levante la cabeza de su pecho y le sonreí, miré al hijo de Hades, algo en él no me dejaba tranquila, pero había sido un héroe.

-Bien hecho Di Angelo, soy Ariadna Crespo- dije tendiéndole la mano, el chico pareció pensárselo pero la aceptó y la soltó muy rápido, Nico parecía ser de mi edad de unos 14.

-Gracias Crespo- dijo frío, yo suspiré y miré a mi alrededor, tenía una herida cruzándome la cintura.

Me dirigí con dificultad a abrazar a todos mis hermanos que por suerte estaban bien, Clarisse me abrazó y me dio vueltas por el aire.

-Bien hecho hermanita- dijo mientras me desordenaba el cabello, yo sonreí estaba contenta de que mi hermana estuviera orgullosa de mí.

Volví a mirar al extraño chico, sin saber que no lo volvería a ver hasta dentro de mucho, mucho, tiempo.

3 años más tarde...

Los árboles pasaban a mi alrededor a una velocidad de vértigo, saltaba las raíces y troncos caídos, esquivaba todos y cada uno de los árboles, a la vez que daba saltos intentando no dar con alguna piedra, la oscuridad teñía mi campo de visión, pero yo conocía esta ruta demasiado bien, llevaba haciéndola, año tras año desde que llegué al campamento, seis años concretamente.