Our babies ~CharlieBabe

o n e s h o t

Babe suelta un pequeño grito de frustración mientras sus dedos se enredan entre su oscuro cabello. Sus ojos se ven cristalizados debido a las lágrimas acumuladas en ellos, a punto de caer y mojar sus mejillas.

Está ubicado en el límite donde la ansiedad y el estrés parecen abrazarle al mismo tiempo. Su corazón late con desesperación en su pecho, y él realmente no sabe que hacer.

Tiene frente a él a dos pequeños bebés llorando de manera preocupante, parecen estar ahogándose con su propio llanto y por la falta de aire que reciben sus pequeños pulmones. Ambos pequeños se encuentran recostados en su gran cuna mientras son observados por un histérico Babe de treinta y dos años de edad, que no tiene ni idea de que es lo que les sucede a sus pequeños hijos.

Han pasado dos años desde que terminó lo ocurrido con Tony, los problemas parecieron abandonarles y finalmente el sol brillaba para todos los integrantes de X-Hunters.

Todo parecía ir excelente para ellos, hasta que un año después Charlie cayó gravemente enfermo, y nadie parecía saber lo que atormentaba al menor. Entre fiebres altas, desmayos y problemas con la respiración, el joven piloto fue llevado con un especialista quien le dió la sorprendente noticia sobre la mutación de su género.

Charlie ahora era un fuerte enigma.

Babe no tuvo problema con ello, aceptó el cambio de su novio y lo apoyó en todo el proceso de adaptación. Aunque ambos tuvieron que tomar medidas de precaución porque claramente no deseaban que ocurriera algún pequeño desliz y terminaran por crear una nueva vida que realmente no deseaban por el momento.

Sin embargo, un año después Babe se encontraba apretando la mano de Charlie con fuerza gritándole cuanto lo odiaba mientras sentía como sus bebés, con ayuda del doctor y enfermeras, eran extraídos de su interior.

Y ahora nos encontramos nuevamente aquí, en el momento exacto en el que Babe quedó completamente solo en su gran hogar, a cargo de sus dos pequeños bebés quienes no dejaban de llorar desconsolados.

Charlie tuvo que ir al autódromo porque tenía una competencia, y claramente todo el equipo de X-Hunters estaba con él. Nadie pensó que tal vez, solo tal vez, una situación como aquella podría llegar a atormentar a Babe.

Él nunca había pedido tener hijos, es más, repudiaba la idea, pero en cuanto se enteró que Charlie y él serían padres, una bonita y cálida presión creció en su pecho. Ésta bonita presión claramente aumentó en el segundo en el cual colocaron sobre sus brazos a ambos bebés, quiénes eran mellizos.

Una pequeña bebé a la que llamaron Nessa y un pequeño bebé al que llamaron Sol.

Ambos niños actualmente tenían seis meses de edad y a pesar de que ya podían balbucear algunas palabras, Babe era completamente inútil para comprender lo que querían.

Ese era un claro trabajo para Charlie, quien parecía eternamente enamorado de sus hijos a los cuales cuidaba con todo el cariño del mundo. Su atención había dejado de centrarse únicamente en Babe, y ahora se repartía también en los pequeños y hermosos bebés.

El fuerte llanto nuevamente resonó contra las altas paredes pintadas de verde pastel, haciendo a Babe sobresaltarse sobre su mismo sitio. Limpió rápidamente sus lágrimas de frustración e intentó acercar el biberón a uno de los bebés, pero este solo golpeó su mano y soltó un nuevo chillido.

— Nessa, Sol... —murmuró intentando no soltarse también a llorar—. No sé que es lo que quieren, por favor...

Ambos bebés siguieron llorando y Babe no pudo aguantar más su desesperación y se soltó a llorar también. Realmente se sentía enojado consigo mismo, frustrado por su inutilidad, estresado por los llantos de sus hijos y claramente ansioso porque Charlie volviera y lo salvara de aquel feo momento.