Cap. 6.

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La noche llegó pronto, Nick estuvo la mayor parte del tiempo jugando con Jack.

No se había permitido seguir llorando, no al menos frente a Jack, incluso Susie le había dicho que podía desahogarse, pero simplemente decía que estaba bien, cómo lo ha hecho toda su vida.

— Papá no te dió tu regalo. - Dijo un poco desanimado Jack mientras terminaba de armar sus legos.

— Papá nunca me da regalos Jack. - respondió un poco seco.

Susie estaba atenta, aprendió a darle su espacio a Nick, sabía que algo le había afectado, aún que no quería decirlo.

— Pero el compro...-

— No compro nada, Jack, ya basta. - Interrumpió Nick de manera brusca y con voz elevada.

Se arrepintió al segundo cuando notó la cara triste de Jack.

— Lo siento. - Dijo dejando el lego de lado. - No quise gritarte perdón, es solo que papá nunca me da nada, ¿De acuerdo? Ya deja el tema.

Jack volteó a ver a su mamá con sus ojos tristes, Susie le dió una sonrisa tranquilizadora.

— De acuerdo. - respondió algo desanimado.

Nick notó que el estado de ánimo de Jack había caído, se sintió mal por haberle hablado de esa manera.

— Oye, ¿que tal si pasamos estos días juntos? ¿tu y yo?, antes de irme - Pregunto con calma. - Cómo antes, podemos ir por un helado, o ir al cine, ¿Que dices?

Mágicamente el rostro triste de Jack, desapareció.

— ¡¡Siii!! - Respondió con emoción. - Podemos ir en la bici, o con los patines.

El tema del regalo quedó en el olvido, Jack estaba emocionado de poder pasar tiempo con su hermano.

— De acuerdo, entonces mañana pasaré por ti para ir a desayunar. - Dijo levantándose del suelo.

— ¿No te quedarás a dormir? - Pregunto un poco desanimado.

— El punto de comprar mi departamento es ir a dormir ahí. - Respondió con una sonrisa. - Mañana vendré por ti.

Después de haberse despedido, Nick salió de la casa de su padre. Aún no podía sacar la horrible sensación de su pecho que había dejado al escuchar a su padre decir que estaba orgulloso de alguien que ni siquiera es de su familia.

Pero no culpaba a George, ni a nadie más, se culpaba a si mismo, por no esforzarse lo suficiente, por no ser lo suficientemente bueno en algo, y simplemente ser una decepción, literalmente desde que nació.

Toto y Susie estaban en su habitación, Susie seguía seria con su esposo, sobre todo porque este no le había dado el regalo que prometió.

— No le diste a Niki su regalo. - Dijo rompiendo el silencio.

— No tuve tiempo. - Respondió de manera cortante.

— Nunca tienes tiempo para tu hijo, Pero si para las demás personas. -

— El tampoco es como si quisiera pasar tiempo conmigo. - Respondió elevando la voz. - Trate de hacer que hablara conmigo y con Lewis, pero simplemente se fue.

— El no quería hablar de trabajo, Torger. - Susie también comenzó a elevar la voz. - Lo que Nicholas quiere es que pases tiempo con el, como su padre, no como su jefe, y que le digas lo orgulloso que estás de el.

— Es mi hijo Susie, no el tuyo, y se cómo debo tratarlo. -

Esas palabras habían afectado a Susie, tal vez Nick no había salido de ella. Pero para ella era su hijo tanto como lo era Jack.

Fantasy - Charles Leclerc Donde viven las historias. Descúbrelo ahora