Chained To You...๑⁠˙⁠❥⁠˙⁠๑..Parte 2

Capítulo XII

'Bajo mi propio lugar'

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-¿Él es papá?.- Pregunto la niña.

Ya había terminado la cena y los Trümper's se habían marchado.- Él es.- Había afirmado Bill.

La niña chillo de emoción.- Eso quiere decir que volveremos a estar ¿juntos?.- Pregunto un tanto dudosa.

-Estamos viendo eso cariño, ya que tenemos que madurar en diferentes aspectos y tenemos que ser lo suficiente maduros para estar juntos ya que no solo se trata de nosotros si no que también de ustedes.

-Yo estoy bien con esto, si es que así vuelves hacer feliz.

-Yo soy muy feliz.

-No como lo eras antes y además cuando hablas de papi tus ojos brillan.

-Mis ojos brillan cuando hablo de la gente que amo.- Exclamó, para luego pellizcar uno de los mofletes de la niña.

-¡Hay!.- Milagro lo miro irritada.- Pero cuando hablas de papi es un brillo diferente a cuando hablas de mi.

-Bien, demasiada plática, es hora de que vallas a dormir.

-Pero..

-Ya son las 11 y todavía no te has dormido, mañana hay colegio.

-Dijiste que podía faltar.

-Bueno es cierto, pero de igual manera es tarde y no me has pedido permiso para desvelar te.

-Ou, ¿Hasta para eso tengo que pedir permiso?.

-Si y ni me hagas esas caras jovencita.

-Eres igualito que mi abuela Simone.- La sangre se le había ido a Bill del rostro.

Milagro y él llevaban años sin hablar de esa señora y que ahora la niña le traiga a recuerdos esos recuerdos de su vida fue un golpe muy bajo.

-¡En esta casa no se habla de esa señora y su nombre es Charlotte y que sea la última vez que la mencionas, agradece que no te pongo un castigo como los que ella me ponía o como me trataba, porque no soy ni la sombra de lo que era ella!.- Bill se había exaltado mucho, la niña lo quedó viendo con culpabilidad y había asentido.

-Lo siento..- Había murmurado en voz baja, para luego subir a su cuarto.

La niña había aprendido siempre a la malas a no hablar de la vida pasada de su padre, no le gustaba que mencionarán a su madre o a sus amigos eso lo ponia loco y con justa razón, así que decidió que está sería la última vez, ya que odiaba la idea que su padre se encerrara en su cuarto y llorará por su culpa, con esos pensamientos amargos se puso su pijama y se dispuso a ir a acostarse a su cama, cuando estaba apunto de dormirse, escucho golpes en su puerta y luego está estaba siendo abierta.

-Lo siento, por haberte gritado así cariño.

-Es mi culpa.

-La culpa no es de nadie, pero en gritarte y asustarte es mía, pero ya lo habíamos hablado antes, en esta casa no se vuelve a mencionar el pasado ni aunque sea necesario, el pasado debe quedarse donde es. Estamos viviendo una nueva etapa donde hay personas y vidas nuevas a las que conocer, así que no quiero que vuelvas a mencionar el nombre de las personas que quedaron el pasado ¿Si?.- La niña asintió.- Ahora dale un beso a papá.

La niña se levantó y le planto un beso en la mejilla, la niña se acomodó para dormir, cerró sus ojos cuando sintió como su padre depositaba un beso en su frente.- Te amo.

-Yo también.

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Espero y les guste.