SINCE I SAW YOU [changlix]

35.

Felix se limpió lás lagrimas bruscamente.

—No— dijo fastidiado— El me tiene que escuchar, yo lo extraño mucho, me voy a quedar afuera de su casa hasta que el regrese.

—Espera, Lix.

—No Binnie, si el no nos quiere ver me voy a escabullir en su casa para que le pueda pedir disculpas, nunca habíamos estado separados tantos días.

Iba a ponerse a llorar en medio de la calle, jamás había visto a Jeongin irse después de haberlo visto, su corazón dolia y mucho, estaba a punto de volver a su cama, envolverse en sus sábanas y llorar hasta quedarse dormido, pero había sacado valor y decidió que tenía que hablar con Jeongin porque no podía permitir estar distanciado con el.

Estaba sufriendo por su madre. Pero si seguía así con Jeongin, lo terminaría de derrumbar por completo.

Así que después de tantos días, tenía un objetivo claro y estaba decidido.

—Esta bien, pero no te puedes quedar afuera, te vas a congelar— habló Changbin— Vuelve a casa y después de un rato vuelves a ir.

—Tienes razón— miró al mayor— Y si cuando voy sigue sin estar, me voy a quedar a dormir a su casa solo para esperarlo.

—Bien Lix, así se habla— le regaló una pequeña sonrisa— Yo ya me tengo que ir, así que nos vemos mañana en la tarde.

El menor se acercó y lo rodeó con sus brazos, para después sentir los dos brazos del pelinegro rodearlo completamente.

—Adiós Binnie.

...

Había pasado una hora, tal vez un poco más, no estaba seguro.

Después de despedirse de Changbin había vuelto a su casa, diciéndole a su abuelita que volvería más tarde a ver a Jeongin ya que no estaba en su casa. Se sentó en su habitación a esperar, asomando su cabeza en la ventana un par de veces por si el castaño aparecía.

Después de una hora seguia dando vueltas en círculos.

—Si el no viene, yo voy a ir primero— se dijo a si mismo.

Agarró su mochila y comenzó a guardar su pijama, cepillo de dientes y sus pantuflas.

Bajó las escaleras y fue a la cocina a buscar a su abuela.

—Abuela— la mayor volteó y le dedicó una pequeña sonrisa.

—Que bueno verte levantado cariño— depositó un beso en su cabeza.

—Quería saber si puedo quedarme en casa de Jeongin a dormir, hace días no lo veo.

—Oh ¡Claro que si! No hay problema hijo, ya te estabas tardando, el tampoco a pasado por aquí, ya se me hacía raro.

El menor le dedico una pequeña sonrisa, se despidió y salió corriendo a casa de Jeongin.

Tocó la puerta esperando a que abra el castaño, pero lo recibió su mamá. De todas formas el sabía que no habría inconveniente al pedir que se quedara a dormir, así que después de ser recibido dulcemente por la mamá de su mejor amigo, se sentó a esperarlo.

—¿Quieres comer algo hijo? ¿O cenar?

—No señora— respondió amablemente— Antes de salir de casa cené. Muchas gracias.

—De todas formas, si se te antoja algo solo avisame, Innie no debe de tardar— el rubio asintió con una sonrisa— Voy a subir un rato a mi habitación que tengo que guardar algunas cosas.

Así que se fue al living a esperar.

...

—Muchas gracias por acompañarme Hyunjin.