Neblina X Y X Criaturas

244 39 7
                                    

Cap. 2

Mi prioridad es quedarme cerca del examinar, así no correré ningún peligro. Por lo que a pesar de aun estar muy cansada comencé a seguirle el ritmo corriendo cerca de algunos personajes familiares.

El lugar está cubierto de neblina, aunque aún se podían ver a unos metros de distancia. El piso aun húmedo y lleno de agua, con cada paso que daba se escuchaba un chapoteo y mis zapatos se llenaban de lodo.

- Escuchen con atención, Asegúrense de mantenerse cerca de mí – Dijo el examinador, a lo que yo sabía que era más una advertencia que otra cosa, perderse aquí significaba la muerte.

A medida que avanzábamos la neblina se hacía cada vez más densa, tanto que incluso era difícil ver a mi alrededor. ¿Cómo demonios se supone que siga al examinador? Ni siquiera pase mi examen de la vista. Pude escuchar la voz de Gon diciendo que se adelantarían un poco y a Leorio respondiéndole.

Ah, sí lo recuerdo las cosas se pondrán un poco feas desde aquí. Tal como lo pensé pude escuchar algunos gritos detrás de mí, lo que solo me helo la sangre. Intente enfocarme en mantener mi ritmo, pero al ver al frente ya ni siquiera había señales de alguna persona, tan solo podía guiarme por el sonido de los pasos a mi alrededor que de forma abrupta deje de escuchar.

Empecé a entrar en pánico ante la idea de estar perdida en el bosque, mis ojos miraron alrededor para ver si tenia la suerte de encontrar a una persona, pero mis esfuerzos fueron inútiles. Seguí corriendo en línea recta en lo que yo pensaba que era el camino correcto.

"Esto está mal... ¿Qué se supone que haga ahora?"

Mi rostro se ilumino y una sensación de alivio me invadió al cabo de unos minutos cuando vi la silueta de una persona entre la neblina. De forma instintiva me acerque a ella, pero esta no se movía.

- Eh... disculpa. – Llamo su atención mientras me acerco un poco más, aunque aun manteniendo una distancia segura.

Me quede paraliza al ver como al voltearse la persona no tenía rostro, era solo una cara en blanco, sin ojos, boca o nariz. Definitivamente esa cosa no era humana, esta intenta acercarse a mi extendiendo sus brazos para alcanzarme. Con un grito agudo me alarmé y comencé a correr sin siquiera mirar atrás o hacia donde iba.

El corazón me latía de forma acelerada por el susto y luego de correr por unos minutos me detuve para poder tomar un poco de aire. Me apoye en mis rodillas mientras jadeaba de forma pesada. Frente a mi escuche el sonido de un zumbido, al levantar la mirada salte hacia atrás observando a una abeja del tamaño de un pájaro, esta era peluda y tenía un color rosado.

Me quede observándola, incluso se podría decir que era un poco adorable. Esta paso a mi alrededor inspeccionándome. Extendí la mano de manera tentativa, seguramente debe de ser muy suave y esponjosa. Sin embargo, mi mano se detuvo en seco al escuchar un grito de dolor cerca de mí. Gire mi cabeza de forma lenta solo para ver cómo estas mismas abejas extrañas se comían a un tipo vivo. Este se retorcía de sufrimiento y agonía mientras las abejas se acumulan en su cuerpo. Mi vista volvió a la abeja frente a mí con miedo.

"¿Son carnívoras?"

Algunas más comenzaron a rodearme, con horror retrocedí unos pasos. El pánico y miedo invadieron mi cuerpo. Eran pequeñas, pero eran tantas que no tarto en formarse un enjambre. Lo único que podía hacer ahora era huir y esperar a que no me alcanzaran.

Corrí lo más rápido que pude esquivando los cadáveres de las personas en el suelo, algunas de estas siendo devoradas y otras aun suplicando por ayuda. La adrenalina corría por mis venas en un intento por sobrevivir a esta situación. De vez en cuando me tropezaba con las raíces de algunos árboles, pero al instante me ponía de pie para seguir corriendo.

Siguiendo Mi DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora