-¿Puedo preguntar, cuál es realmente tu plan?- el rey conocía a la duquesa de cabellos carmesí, ambos solían apostar juntos, por muchas ocasiones, inclusive, se rumoreaba que aquella mujer había ganado su título gracias a un juego con el monarca, pero eso rápidamente fue desmentido ya que, un rey jamás jugaría con los títulos de la nobleza ¿O sí?
-Eres todo un gran actor...- la Duquesa movió su peón en aquel tablero. -Hasta parece que de verdad eres el rey por derecho de este lugar.
-Cuando gané a tu padre, creí que había quedado claro las reglas.- El rey golpeó el peón de color blanco para poner el suyo en su lugar. -Si yo ganaba me quedaba el trono y, si el perdía iría a su final junto a toda su familia.
-Si embargo yo me he ganado mi vida... ¿No es así?- El rey miró a su sobrina quien le desafiaba, recordaba muy bien la primera vez que aquella niña le ganó en su primer juego. La Duquesa aprendió el juego de las cartas gracias a él, y cuando su familia fue ejecutada ella, siendo aún una infante, desafío al rey.
-“Si gano me dejará vivir”
El rey no jugó en serio, la había dejado venderle, y la razón era porque ese valor, consideró que era digno de ser una sobreviviente, de ser la duquesa de ese reino. Por años la dejó hacer lo que quisiera siempre y cuando esto no interviniera en los asuntos reales, su sobrina era solo un alma rebelde que disfrutaba de las fiestas y las señoritas para acompañar su soledad, no era una amenaza para él, aún cuando él mismo la condenó a esa soledad.
-¿Cuál es el motivo de este juego Duquesa?- el rey parecía estar firmando su victoria.
-Que siempre cumples cuando pierdes... Y lo he pensado, ganas cuando te digo lo que quiero, cuando te parece que no es nada grave, pero ahora lo he callado para que aceptarás jugar.
-¿Es un nuevo truco? Puedes decirlo, de todas maneras, creo que este juego ya está ganado.- la Duquesa sonrió.
-Si... Bueno, ya que lo has pedido.- la Duquesa movió una pieza más. -Quiero vivir aquí y tener a tu hija- colocó la pieza con certeza.
-¡¿Qué has dicho?! Es imposible!- el rey dejó de concentrarse en el juego. -He aceptado que hagas tus cosas con las demás hijas de los nobles pero, ¿Con la princesa? Es mi hija de quién hablas. Me niego. Además... Ella está comprometida.
-No quiero tenerla por siempre, es solo un capricho... Escucha, quiero tener la oportunidad de hacer que caiga en la tentación, no te la pido directamente, se qué tiene compromiso.
-¿Por qué pedirías algo así? Además...- el rey conocía a su hija mejor, Miriam era altanera.- Ella no se dejaría siquiera que la mirarás, ¿Sabes que te detesta? Desde que sabe que jugamos... Desde la vez que te vencí y ella... Nos vió cuando reclamaba mi premio.- El rey pasó su mano por la mejilla de la Duquesa.
-Eso lo hace más divertido... Entonces ¿Cumplirás?
-¡Ja! Si, como si fueras a ganar...- la duquesa sonrió, tomó una pieza más y golpeó una pieza del tablero.
-Hacke mate...- dijo al tener al Rey atrapado.
❀
Miriam había terminado de mandar a Lily con criadas, se sentía alterada, podía sentir el desagrado más y más presente.
-¿Por qué la Duquesa...?- Anna no terminó de preguntar.
-Es una mujer despreciable...-miriam comentó. -Tenia quince años cuando la conocí.- Miriam se acercó a la ventana, Anna se colocó a un lado suyo. -Es... Hija del hermano de mi padre, y no tenía nada en contra suyo, no hasta que la ví.
La joven princesa iba a contarle a su padre lo que había aprendido, una adolescente no puede detenerse a pensar muy claro, pero debió haber sospechado cuando los guardias el detuvieron.
-No puedo dejarla pasar alteza...
-¿Disculpa?- la princesa también fue caprichosa y engreída, pero más que eso, era conocedora del poder que tenía.
-debo pedirle que regrese a su habitación...
-¿Quién te crees? Soy la princesa haste a un lado o haré que te ejecuten. ¡Abre esa puerta!- y así lo hizo, el guardia abrió la puerta, Miriam caminó por él pasillo de la habitación, a medio camino escuchó sonidos desagradables, la cortina cubría lo que había del otro lado, pero aún así Miriam fue y la abrió, ahí encontró a su padre el rey siendo infiel a su madre con la Duquesa, aquella que era menor que él, aquella que se suponía que era su familia.
-El solo verlos me hace recordarlo...- dijo Miriam, Anna no esperaba tal confesión, pero no le sorprendía mucho tratándose de aquella mujer.
-Mi padre, es alguien que odio y quiero a la vez, me da asco pero no puedo olvidar el lazo que me une a él, y la Duquesa, la detesto. Creo que soy injusta... Porque debería odiar completamente a mi padre también.- Anna colocó su mano en el hombro de Miriam, ella se acercó buscando su contacto.
-No sé qué decir ante eso alteza...
-No es como que halla mucho que decir Anna...- Miriam suspiró. - Tengo un mal presentimiento Anna, se que esa mujer no estará aquí con buenas intenciones.
❀
-¿Cuál es su plan Duquesa?- Lily preguntó, la Duquesa estaba en su habitación tomando un poco de vino que había conseguido de otra criada pues, Lily no estaba acostumbrada a ser una y eso lo entendía.
-Lo dije, quiero tener a Miriam... Al principio era solo para hacerle sentir a esa princesa lo que su cerdo padre me hizo sentir cuando me hizo apostar mi cuerpo.- bebió el vino de la copa y se sirvió todavía más. -Deudas de juego... Pensé que estaba obligada a cumplir, él me dijo lo que quería cuando ya había ganado, no pude negarme, así que hice lo mismo.- Lily se sintió un poco incómoda. -Si logro tener a Miriam me sentiré mejor... Y, eso también te ayuda a tí.- La duquesa tomó el rostro de Lily para besarlo de una manera brusca. -Te dejaré jugar con esa sirvienta.... Ambas ganamos ¿No?
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Lily Of The Valley... Anna's New Flower
FanfictionEsto es un fanfic del manhwa Lily of the valley, debido a que terminó muy rápido y me quedé con ganas de hacer algo... Ella se había ido de su lado, pero no estaba bien. Anna no sabía como vivir sin Lily, En cada rincón de esa antigua mansión sent...