Jisung nunca planeó quedar embarazado y mucho menos del jefe de la mafia más peligrosa del país Lee Minho. Ahora atrapado en un mundo de sombras y violencia Jisung no solo debe protegerse a sí mismo sino también al los bebés que lleva dentro. Mientr...
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Cuando las puertas del elevador se cerraron el aire se volvió más denso cargado de la anticipación y las feromonas que Jisung comenzaba a liberar sin poder controlarlas. Su cuerpo entero temblaba de emoción, mientras Minho, atento notaba cada cambio en su omega. La atracción se volvía insoportable y el aroma que Jisung emitía solo intensificaba el deseo de Minho haciendo que sus instintos como Enigma afloraran aún más.
El sonido de la puerta al cerrarse resonó como un eco lejano, pero Jisung apenas lo registraba. Su cuerpo vibraba de anticipación y su mente apenas podía procesar algo más allá de la presencia abrumadora de Minho que lo envolvía por completo.
Las feromonas en el aire se volvían más densas, más cargadas, mientras Jisung comenzaba a perder el control de sus propios instintos su cuerpo respondiendo de manera natural al aura dominante que Minho un Enigma desprendía.
Minho se movió con la rapidez de un depredador cerrando la distancia entre ellos en un segundo. Antes de que Jisung pudiera reaccionar ya estaba atrapado entre el pecho firme de Minho y la pared fría detrás de él.
Sus manos se aferraron a los hombros de Minho sus ojos entrecerrados por el deseo mientras su respiración se aceleraba incapaz de apartar la mirada del hombre que tenia frente a él. Minho era inhumano en su fuerza, en su presencia. Jisung sentía que cada fibra de su cuerpo estaba en llamas y todo lo que podía pensar era en cómo necesitaba sentir más de el.
— Minho... — susurró Jisung su voz quebrada por el anhelo. Sus labios temblaban su cuerpo entero suplicaba más.
Minho no respondió con palabras. No era necesario. En lugar de esa tomó el rostro de Jisung entre sus manos y lo besó profundo y lleno de una necesidad primitiva que le robó el aliento al omega.
Jisung gimió en los labios de Minho, sus piernas temblaban bajo la intensidad del beso mientras su mente se nublaba, completamente sumergida en el deseo insaciable que lo consumia
Con un solo movimiento fluido Minho lo levantó haciéndolo rodear su cintura con las piemas. La sensación de estar tan cerca de él, de sentir su musculoso cuerpo bajo sus manos casi hizo que Jisung se desmoronara ahí mismo.
La diferencia de tamaño entre ellos era inmensa y eso solo aumentaba el deseo de Jisung. Sentía que Minho lo podía controlar completamente que lo podía dominar de una manera que nadie más podría y eso solo lo hacía querer más.
El Enigma lo llevó hasta la cama con una facilidad que solo intensificaba el poder que irradiaba. Jisung apenas podia pensar todo lo que sentía era la presión de los labios de Minho contra los suyos, el calor abrumador que envolvía su cuerpo mientras lo desnudaba con una urgencia que casi dolia.Cada pieza de ropa que caía al suelo era un paso más cerca de lo inevitable y el omega no podía más que gemir y suplicar sin siquiera darse cuenta de lo que decía.
Cuando ambos estuvieron desnudos, el aire entre ellos se volvió insoportable. Minho lo miró con una intensidad feroz, sus ojos oscuros recorriendo cada centimetro de Jisung. La diferencia de tamaño y poder era aplastante, pero en lugar de hacer que Jisung se sintiera pequeño lo hacia sentir deseado, necesitado de una manera que no podía explicar.
