Celestia y Demónica

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Narra Nathan

¿Qué acaba de pasar? La actitud de ____ había cambiado de un momento a otro sin ningún motivo. Sí. Estaba un poco celoso de los comentarios de Edgar, pero era más que consciente de que es imposible que no le digan ese tipo de cosas. Es decir, es una chica carismática, alegre, talentosa y muy guapa. Empezaba a sobrellevarlo.

Sin embargo, una parte de mí pensaba que mis celos no eran el problema principal que tenía ____. Me ocultaba algo. Estaba seguro, pero no podía obligarla a decírmelo.

Seguí el camino que acababa de tomar ____ y me coloqué en mi posición. No podía dejar de observarla. Estaba perdida en sus propios pensamientos.

Willy indicó el inicio del partido, pero un trueno apareció en el cielo. Se había nublado bastante en menos de diez minutos. Kevin insistió en seguir con el partido de entrenamiento cuando sonó otro trueno más fuerte. Sin embargo, decidimos empezar, pero esta vez lo que cayó fue un rayo.

-¿Qué hacemos? ¿Seguimos o lo dejamos? –Pregunté mirando a Mark.

-¡Ah! –Exclamó María mirando su pulsera.

-¿¡Pero qué!? –Gritó ____ repitiendo la misma acción que su hermana.

Las dos pulseras estaban brillando.

-Como la historia que contó Nelly, –dijo Camelia.

-No es posible, –negó sin creerlo la nombrada–, si solo es una leyenda.

-Ya decía yo que esos viejos me daban muy mala espina, –dijo molesta Tori–. Aquí está pasando algo muy raro.

En ese momento un rayo alcanzó uno de los pósters de luces que se encontraba en una de las esquinas del campo de entrenamiento, levantando una gran cantidad de tierra y viento. Cuando se detuvo, mis ojos recorrieron el campo hasta llegar al cuerpo de ____. Estaba bien.

-¡Mark, encima de ti! –Avisó Darren.

-¿Quién es ese? –Murmuró Scotty.

-¿De dónde ha salido? –Preguntó Paolo.

-Tiene un aspecto bastante raro, –expresó Xavier.

-Es un ángel de esos, –dijo Jack asustado.

-¿Qué pasa contigo tío? –Exclamó Hurley.

El chico tenía un balón entre sus pies que tiró al aire y a una velocidad extrema llegó hasta él para chutar hacia todos nosotros. El balón iba con tanta fuerza que su potencia hizo que ninguno quedara en pie.

-Vengo a buscarte, –dijo

El chico se encontraba delante de ____ quien estaba asustada y confundida. No sé qué le hizo, pero ella no se movió cuando dio un paso hacia ella. Con dificultad corrí hacia ella.

-¿¡Qué crees que haces!? ¡No te atrevas a tocar a ____!

-Humano, ¡no intervengas! –Chutó el balón hacia mi estómago y fui arrastrado varios metros atrás dolorido.

-Os lo advierto, –el chico se acercó a mí con ____ en sus brazos. Quise moverme, pero el dolor hizo que mis músculos no respondieran–. Si seguís interfiriendo en nuestros asuntos os espera un final terrorífico.

En lo único que podía centrarme era en ____. Inconsciente.

María volvió a soltar un grito. Otro chico estaba delante de ella, pero el primero le tiró un balón que el segundo detuvo.

-Vete, –ordenó el que tenía a ____–, sabes que este no es lugar para seres viles y malvados como vosotros.

-No te des tantos aires fanfarrón. ¡Mejor que te largues tú! El Dark team y el rey de los demonios, ¡dominarán este mundo y es un hecho!

Corramos juntos | Nathan y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora