Dary.
—Déjate de juegos y andando. Debemos salir de aquí —articula, le detallo y está todo lleno de sangre.
Yo lo sigo cuando el empieza su caminata apresurada.
Cómo no me conviene quedarme aquí, lo sigo con mis pasos apenas perceptibles, no me deja llevarle el ritmo, la persecución me ha robado energía. No soy una persona atlética, me canso rápido.
De repente voltea y maldice cuando me ve, por un momento pienso que viene por mi.
Pero antes de que eso pase. Veo a dos tíos vestidos de verde acercarse, estaban detrás de mi, y se dirigen hacia él.
¿De dónde sacan esos uniformes esta gente? —Me giro hacia ellos para detallarlos mejor.
Uno de ellos no avanza y se queda a mi lado, me apunta, tiene el cabello largo y piel pálida. Trato de retroceder pero me agarra por el cuello. No lo reparo.
Le doy gracias al cielo que solo son estos dos hombres. «Creo»
Así será más fácil para Rey acabar con ellos. Aunque sean dos contra uno, estoy segura de que no es nada para él.
Sin previo aviso, el hombre que me sostiene habla.
—Quieto ahí o la jodo a ella.
—No querrás hacer una estupidez —Rey se queda súper tranquilo y con cautela lo mira.
Rápidamente el hombre que está con él se le viene encima, pero el mafioso con su gran agilidad lo esquiva y de una forma tan fácil, se le va por la espalda.
Un tiro al aire me sobresalta.
—¿Dónde está el arma? —pregunta aquel hombre.
Otro hombre sale de la nada y Rey no duda a la hora de clavarle un tiro a su frente. Cae de inmediato.
Ellos se echan un duelo de miradas y el que me sostiene me avienta contra el suelo golpeándome los codos al caer. Retrocedo lentamente.
—Eso no te concierne, anda ve, y dile a tu jefe que no pudieron contra mi.
El susto no me deja pensar y olvido por completo dónde estamos, sigo retrocediendo hasta que me resbalo y caigo al vacío.
—¡Oh! —grito a la vez que cierro mis ojos al sentir un subidón por mi estomago.
Se siente horrible…
Había olvidado que estamos sobre rocas, casi un acantilado.
Por mis adentros ruego por no caer sobre una roca, sería toda una calamidad.
La caída es larga y el impacto del agua me causa pinchazos y espasmos en mi piel.
Trato de volverme una bola, pero caigo sobre mi brazo derecho, sintiendo un fuerte dolor, como si me hubieran golpeado fuertemente de ese lado, siento como el agua entra en mi oído de ese mismo lado.
¡Por mis cojones! ¡El agua está helada! —Max tenía razón.
Lucho por tomar aire en la superficie. Mi estómago se contrae, ya que siento el frío colarse hasta mis huesos.
La corriente es un poco fuerte y no me deja nadar, —como si supiera—, lo que hace es arrastrarme. De repente me mareo y un fuerte dolor de cabeza me hace cerrar mis ojos.
La corriente me arrastra, no logro tocar el suelo, joder soy tan enana. Trato de nadar e impulsarme hacia arriba, pero me es difícil, termino tragando agua hasta por las narices.
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Atrapada en la Mafia
Misteri / Thriller"Ella solo quiere quedarse, más al final no tiene otro remedio que alejarse" No sabe si fue el destino quién la indujo en ese mundo. Aún así no se deja vencer porque lo tiene a él. Un Líder que sin darse cuenta, está dispuesto a lo que sea para pr...