Después de decir esas palabras, Tom acarició por última vez la erección de Bill, para luego concentrarse nuevamente en terminar el tatuaje.
Tom concentraba su mirada en el muslo de Bill, donde estaba terminando de hacerle un tatuaje. La aguja zumbaba suavemente mientras trabajaba, y Bill cerraba los ojos, disfrutando del tacto de la piel y la sensación del tatuaje que iba tomando forma.
A medida que Tom trabajaba, Bill comenzó a sentir una sensación de placer que iba más allá del simple dolor del tatuaje. Era como si cada movimiento de la aguja enviara un estremecimiento de placer a través de su cuerpo, y no podía evitar sonreír.
Tom notó la reacción de Bill y sonrió, sabiendo que estaba disfrutando del proceso. –Wow, Bill, cariño, me encanta ver cómo lo disfrutas– Comenzó a trabajar con más lentitud, saboreando cada momento, y Bill abrió los ojos, mirándolo con una mezcla de amor y deseo.
Sus miradas se encontraron, y por un momento, se olvidaron del tatuaje y del mundo que los rodeaba. Solo estaban ellos dos, conectados por una sensación de placer y amor.
Tom se inclinó un poco más, su rostro cerca del muslo de Bill, y Bill sintió un estremecimiento de anticipación. –Bill: Por supuesto, lo estoy gozando. ¡Cómo no voy a gozar! Tienes unas manos celestiales...–
La aguja seguía moviéndose, pero ahora era como si estuviera dibujando algo más que un simple diseño en la piel de Bill.
Era como si estuvieran creando algo nuevo, algo que solo ellos podían entender. Y cuando Tom finalmente terminó el tatuaje, Bill sintió una sensación de satisfacción y amor que no podía explicar.
Una vez finalizado el tatuaje, Tom procedió a limpiar con delicadeza el muslo de Bill, retirando cualquier residuo de tinta o sangre con un paño suave y húmedo. Luego, con una sonrisa satisfecha y amorosa, le dijo: –'Ven, cariño, acércate y mírate. Mira cómo quedó, está perfecto.–
Después de escuchar las palabras de Tom, Bill, con los ojos llenos de excitación y emoción, miró hacia su muslo, donde estaba el tatuaje de dos dragones rodeando una rosa. Era hermoso. Mientras que impresionado, Bill le dijo: –'Dios mío, es maravilloso. Se ve increíble'.–
Tom acariciaba sensualmente la piel de Bill, siguiendo los contornos de su muslo con sus dedos. – ¿Te gusta jugar algo
rudo, Bill? –preguntó con una sonrisa pícara. –Dime, Bill, ¿te gusta cuando la cera caliente de una vela cae sobre tu piel, dejando una exquisita sensación de calidez placentera?–Bill cerró los ojos, disfrutando de la sensación de las caricias de Tom. –Me gusta... me gusta todo –, respondió con un gemido. Mientras sentía como Tom acariciaba su pene por encima de sus boxers, que ya tenían una marca húmeda por el líquido preseminal .
Tom se inclinó un poco más, su aliento cálido sobre la piel de Bill. –¿Y qué tal un juego de seducción? ¿Te gustaría que te haga esperar, que te haga desear mi toque?–
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Rosa marchita
RomanceLa historia trata sobre Bill Kaulitz, un chico universitario de 20 años que estudia artes escénicas, aunque en realidad su madre es quien lo obliga a estudiar, y Tom Nightmare, un chico bastante guapo, tiene 20 años y es un Asesino en serie, su marc...