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—No tienes nada más que hacer? ㅡle dije a aquel chico que me ofreció su tarjeta.

—No te quiero obligar o quieres caminar? —se burló de mi mientras sonreía—

—Veo que aprovechas la situación,bien iré —dije algo avergonzada—.

Entre al bus y me senté al final mientras miraba las ventanas mojadas pero, de pronto me entró bastante cansancio.

Cerré mis ojos y finalmente me dormí.

Pero paso algo extraño...

¿Estaba de nuevo en ese paradero?

Desperté en el hombro de ese chico pero en el paradero. No entendía nada.

—¿Quién eres tú? —le pregunté aún inconsciente—.

—Ryan.

—¿Que es lo que pasó?

—Esperando un bus supongo ¿Como te llamas? —me preguntó evadiendo mi pregunta, parecia que solo insistiera en conocerme—

—¿Nos conocemos?

—Haces muchas preguntas, nos estamos conociendo.

Bufé y me sobe los ojos aún con cansancio, todo no tenía sentido y quería irme a casa.

—Me llamo Dará.

En ese entonces me dio un golpe de consciencia.

—¿Tu y yo ya nos habíamos subido?

—No creo.

—Hace un moment —Mis palabras fueron interrumpidas por un trueno—.

Podía ver en como el bus llegaba nuevamente hacia nuestra dirección.

—Quisieras ir conmigo? —me dijo—.

—No me queda de otra.

Al subir pase mi tarjeta pero...

—Señorita su tarjeta no funciona.

Ryan me miró conteniéndose la risa repitiendo la misma frase

—Puedes tener la mia sin problema —me dijo mientras me ofrecía su tarjeta—.

—Bueno.

Volví al mismo sitio pero está vez Ryan estaba a mi lado, le mire perpleja.

ㅡ¿Algún problema?

ㅡNo.. nada ㅡrespondíㅡ.

ㅡMe tienes miedo ¿no?

ㅡNo dije nada, ¿Porque debería?

De pronto sus palabras se iban desvaneciendo en mi cabeza..

¿Que estaba pasando?

Otra vez estaba en ese maldito paradero. Se sentía como casa, no paraba de volver aquí una y otra vez sin explicacion alguna.

Quería ir a casa pero el me detuvia siempre.

ㅡ¿Porque haces esto? ㅡle dije mientras estaba tumbada en el sueloㅡ.
ㅡ¿Nos conocemos? te me haces familiar ㅡdijo Ryanㅡ

Con cansancio solo rode mis ojos y los volví a cerrar.

Cerré mis ojos y veía a Ryan venir hacia este paradero nuevamente.

Paso tanto tiempo que sentía que pasaron 7 días, se había vuelto mi rutina seguir en este paradero pero no permitia que yo pudiera seguir con mi ruta, necesitaba irme.

No entendía porque el insistia tanto en quedarme tanto tiempo, se me hacía cada vez más familiar, le entendía más al estar más tiempo intentando romper este extraño suceso.

ㅡSabes a veces me gustaría tener un gran futuro ㅡme dijo con entusiasmoㅡ.

ㅡOh.. yo quisiera saber que hay más allá de este paradero.

ㅡPuedes saberlo si te quedas un poco más.

ㅡ¿Tú crees?

En ese momento me vinieron tantas preguntas ¿hay algo más allá de estas conversaciones? ¿Podríamos estar en un lugar diferente? ¿Podríamos salir de este paradero y llegar a mi destino?

ㅡ¡Claro! Ya casi llegamos a mi destino.

En ese entonces sentí fe y pude aclarar todas mis preguntas ¿Saldré de este bucle?

El bus se paró y mi corazon latio a mil, pero volvía a sentir en como mis ojos se caían, mi cuerpo tan cansado e inmune...

Abrí mis ojos nuevamente y grité con tanto dolor al ver que seguía en el mismo sitio.

ㅡ¡Maldición!

Sentía el dolor en todo mi cuerpo,  mis lágrimas caían con tanta rabia, pero solo sentía en como cada vez me volvía más loca con el pasar del tiempo al intentar salir.

Rostro de otro mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora