capitulo único

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Dazai estaba encadenado a la pared y al piso en una habitación bastante oscura la cual era una de las tantas habitaciones para tortura que hay en la Port Mafia, el por qué estaba aquí es fácil una de las misiones salio mal y el al estar a cargo de ella tendrá que pagar las consecuencias como fácil y justamente para eso se encontraba aquí.

Dazai al estar concentrado en sus pensamientos no se dio cuenta de que el castigo estaba por comenzar, una pequeña puerta fue abierta de manera estruendosa captando la atención de Dazai quién volteo hacia la puerta la cual tenia unas barras impidiendo que los perros dentro de ella salieran.

Dazai los miraba sin emoción alguna paresia una muñeca, una descripción bastante acertada debido a que sus ojos no reflejaban nada y también el por que pareciera que con cualquier movimiento brusco podria romperse cusa que curiosamente es todo lo contrario aún que en estos momentos eso no serviría de mucho.

Dazai lo sabía a la perfección, el verdadero motivo por el cual estaba aquí no era por lo que pasó en la misión solo era para la propia diversión de Mori el cual le miraba con una sonrisa oscura y sinica,

Cerro los ojos esperando el dolor el cual no tardo en llegar de una forma bastante interesante al ser mordido, rasguñado y zarandeado por los perros los cuales no paraban de morderle en donde sea que pudieran ya sea en sus brazos piernas torso e incluso en su cuello, Dazai por mas que queria evitar gritar por el fuerte dolor no lo pudo evitar.

Después de que Mori se cansó de verle ser mordido por los perros hizo que volvieran a aquella jaula para posteriormente irse del lugar dejando a Dazai tirado en el piso sangrando no sin antes soltarle para que se pudiera ir, pasó al menos unas dos horas para que Dazai por fin pudiera irse del lugar a su habitación en la sede la cual se encontraban retirada de las demás y serca de la de Mori razón por la cual prefiere vivir en su contenedor antes que en una de las habitaciones de la sede.

Dazai sabía la verdad razón por la cual Mori se la dio, solo tenía esa habitación para ventaja de Mori ya que al tenerlo tan serca podría divertirse sin intervenciones de los demás y sin que algún chismoso les viera, por esa razón Dazai casi nunca la a usado.

Al estar por llegar a las ultimas habitaciones Dazai se maldijo internamente al escuchar unas voces bastantes conocidas por lo que trato de actuar como si nada a pesar de que apenas y puede mantenerse en pié sin tambalearse, Al dar vuelta y encontrarse A Chuuya, Akutagawa, Tachihara y a Gin trato de caminar lo más normal y rápido para no llamar la atención de ellos pero sabía que con el simple hecho de estar bañado casi por completo de sangre ya era algo muy llamativo.

A un que es no le funcionó por qué de todos modos ellos le miraron algo sorprendidos y como no, no solo estaba cubierto de sangre y si mirabas atentamente podías notar que estaba herido y su mirada era una sin vida no reflejaba emocion alguna aún que eso a Dazai lo le importo y siguió caminando como si no sucediera nada pero al estar lo suficiente lejos se recargo en una de las paredes simple ya no podía no aguantaba el dolor y sentía que en cualquier momento caería hací que trato de acelerar su pasó.

Por fin había llegado a su habitación, entro rápidamente a ella, al estar adentro Dazai se dejó caer en el piso para poder recuperar algo de fuerzas, al pasar un rato se volvió a levantar para entrar al baño para empezar a desvestirse y entra a la ducha, al terminar de bañarse Dazai empezó a tratar sus heridas lo mejor que pudo.

Al terminar de tratar sus heridas, ponerse sus vendas y la ropa Dazai se acostó en la cama para descansar un poco aún que quisiera irse de ahí no podía estaba muy cansado como para tratar siquiera de irse sabía que Mori solo paro el castigo por qué en la noche le haría algo peor de lo que ya le había hecho por lo que tratarían de irse antes de que el pudiera salir de su oficina aún que no estaba seguro de que lo lograría al menos haría el intento.

el castigo del demonio prodigio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora