Los años habían pasado, ya era una adulta madura y con una mentalidad clara de la vida, con el pasar de los años Liam fue un apoyo emocional muy importante en mi vida, tanto que empecé a salir con él dejando atrás mis pensamientos sobre mi primer amor, aún todos los días que estuve con Liam nunca dejé de pensar en Rindou.
Lo último que llegué a saber de Rindou era que estaba molesto, ya que mi relación con Liam era el centro de atención por medio de los paparazzis lo fue por mucho tiempo hasta que nos hicimos adultos.
Desperté al sentir como alguien besaba mi cuello, abrí lentamente los ojos notando a Liam dejando los besos en mi cuello.
— Despierta linda, irás tarde a tu trabajo— Dejo de dejar besos en mi cuello.
— Buenos días Liam —dije entre cortado tapándome con la sabana — ¿A donde vas? —pregunté al verlo tan arreglado.
— Tengo una gira por Europa...quería llevarte conmigo pero sé que tienes que quedarte por tu trabajo —respondió viéndose al espejo colocándose colonia.
— Tienes razón— Me levanté de la cama tapando mi cuerpo desnudo — ¿Cuando regresas?
— Probablemente en uno o dos meses —Se acercó a mi poniendo sus manos en mi cintura — ¿Te gustó lo de anoche? — Dijo juguetón a lo que asentí.
— Si...estuvo bien —me alejé de él tomando una bata.
— ¿solo bien? Ya llevamos once años juntos y cada que tenemos sexo es lo único que dices ya dime la verdad te gustó o no —Me miró fijamente a lo que no respondí — bien...te esperaré abajo para desayunar.
Asentí y entré al baño, no quería ser grosera el no era malo en la cama la que tenía un problema era yo, no podía sentir placer alguno al estar con el, sentía que me hacia falta algo.
Empecé a bañarme y al terminar salí de la ducha y lave mis diente.
Salí del baño y empecé a vestirme, me puse un poco de maquillaje y luego salí de la habitación.
( tu uniforme)
Bajé las escaleras y como de costumbre en el comedor ya estaba la comida echa, me senté al lado de Liam el cual desayunaba, empecé a desayunar a su lado en un silencio incómodo.
— ¿Y...sacarás nuevos temas? — rompí el silencio mientras metía un bocado a mi boca.
— Si, ahora que esté en Madrid colaboraré con otros rapero — respondió seco dando un bocado a su comida.
No respondí y tome mi café, este me vía seriamente, parecía estar escaneando cada parte de mi.
— Oye t/n, tú de casualidad no eres ninfómana —al escuchar eso me atore con mi café — solo preguntó, siempre tienes deseo sexual pero nunca estás satisfecha.