El hilo rojo | Bautista y Denisse |

19- no aguanté

18/1/25
Narra denu

Eran las 8:30, me levanté con dolores horribles en el vientre, intenté aguantar lo más que pude, pero me tuve que levantar, era muy complicado, por suerte luchi estaba bien en la punta así que a ella no la movía, además, tenía sueño pesado, pero el problema era bauti, estaba abrazado a mi, con una mano por encima y la otra debajo de mi cuello, y su cabeza en mi pecho, me daba tanta pena moverlo, pero si no me paraba iba a morir ahí mismo.

Así que con cuidado intenté desprenderme de sus brazos, pero me fue imposible, cada vez que me intentaba mover me abrazaba aún más fuerte, amaba eso, pero tenía que salir
— bauti, amor — susurré
— Mmh
— necesito que te muevas quiero ir al baño — mentí
— bueno, pero volves, eh
—te lo juro, ahora déjame salir — sacó su brazo de encima mío y me paré para ir al baño, tenía la cara súper hinchada y me sentía mal, quería comer, pero si comía sentía que iba a vomitar, no sabía que hacer, así que recurrí al último recurso: decirle a bauti que estaba embarazada

Fui nuevamente a la habitación y le toque el hombro para que se despierte

— pasó algo linda — me encantaba cuando me llamaba así, sentía como las mariposas revoloteaban en mi panza
— necesito que vengas al baño conmigo — ya había preparado las pruebas de embarazo y un remerita chiquitita que tenía guardada de cuando yo era bebé, también un mini pañal, no pregunten dónde lo tenía
— para que?
— necesito decirte algo — se levantó con sus pelos despeinados, tenía un short y estaba sin remera, me encantaba verlo así, pero no sabía lo que se le venía, estaba muy nerviosa, mis manos sudaban y mi corazón iba a mil

— cuando te lo diga quiero que reacciones, tipo, en voz baja, no quiero que grites porque luchi está durmiendo, okey?— ya estábamos en el baño con la puerta cerrada, el por orden mía tenía los ojos cerrados, encima de la mesada estaba la remera y el pañal, en mis manos que estaban detrás de mi espalda tenía las pruebas y en el espejo había dejado una notita que decía:
No grites, pero vas a ser papá :)

— ¿estás listo? — pregunté
—siempre listo
— okey...1...2...3... ábrelos — cuando abrió los ojos y vio el pañal y la remerita no entendió nada me miró desconcertado
— que es esto, o sea se que es es una remera de bebé y un pañal, pero ¿qué significa?
— mira la notita del espejo — cuando le dije eso, levantó su mirada y agarró la notita, ver como la empezó a leer me dio más nervios aún, pero ver como se le formó una sonrisa enorme en su cara y como le brillaban sus ojitos hizo que me calmara, sentí mucha ternura

— me estás jodiendo no Denisse — dijo sin aún borrar la sonrisa de su cara
— creo que no — saque las manos de atrás mío y le mostré las pruebas, estaba totalmente anonadado — vas a ser el mejor papá del mundo
— ¿voy a ser papáv ¡VOY A SER PAPÁ!— por suerte no grito
— shhhh, acá adentro hay una mini baunisse — señale mi vientre
— Denisse te amo, en serio, diosss, gracias gracias, gracias— se agachó y comenzó a besar toda mi panza, vi como se le empezaban a caer un as lagrimas, me llenó el alma ver como había reaccionado, fue mejor que comí lo había pensado

— ya sabes que es — dijo sin dejar de besar mi panza
— para de darme besos que sino me derrito — se levantó y me besó muy tiernamente, me levantó para quedar a upa de él, dio una vuelta y me besó nuevamente, me bajo y empezó a acariciar mi panza — esto no se lo podes contar a luchi, por favor
—por qué no, es mi nueva mejor amiga, ni al chino le puedo contar
— lo pensaré
— estoy muy feliz, tanto que no sé cómo expresarlo, ya hay que ir pensando nombres ya te había dicho que si tenía un hijo quería que se llame Simon y que su tenía una hija quería que s ella me Gala ?
— creo que si, ya me lo dijiste
— hay que sacar turno para que te vayan a shaver una ecografía
— todo a su tiempo bauti, ahora hay queue aprovechar estos días que nos quedan con luchi, te parece?
— está bien, pero no pienses que te voy a dejar de tocar esa pancita donde está mi segundo amor, porque el primero sos vos — cuado dijo eso se me estrujó el corazón y lo abracé fuertemente