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Al día siguiente el cuerpo de HoSeok se había vuelto un nudo de dolor. Su espalda, cabeza y estomago no estaban del todo bien, pero su teléfono no había dejado de sonar y la emergencia lo llamaba. Se duchó y bajó a la cocina por fruta; JungKook estaba ahí comiendo avena con leche y miraba su teléfono.
—Necesito tu ayuda— le dijo el mayor mientras buscaba una compota de fruta con proteína en el refrigerador —. Necesito que le lleves algo a YoonSuk al apartamento de su amiga
—Eso implica saltarse la primera clase— resumió en voz alta el chico que no termina problemas con faltar a la clase que practicamente había ya cursado con notas perfectas.
—No creo que sea la primera ni la ultima a la que faltas—suspiró y le miró con su rostro de zombie post noche alcoholizada —. Te dejaré en el lugar y tu solo subes al apartamento 15 donde vive su amiga.
—Bien, seré su paloma blanca del perdón— JungKook dejó su pocillo de avena en el lavaplatos y tomó su mochila saliendo de la cocina camino al auto.
Una vez arriba JungKook vió la braga tirada en el piso y se la guardó en el bolsillo, tenia pensado devolverla hoy mismo ya que había logrado su propósito a medias.
—¿Qué piensa hacer para que noona vuelva a casa?
— Pedirle perdón obviamente, pero no podré hacer esto personalmente así que me tienes que ayudar en la primera parte de mi plan— le miró de reojo, el chico de ojos brillantes miraba el paisaje antes de llegar a la florería donde alguien lo estaba esperando con un ramo de lirios.
HoSeok lo tomó y se los entregó a JungKook no sin antes meter una tarjeta dentro que seguramente era un mensaje personal para ella. JungKook miró las flores en sus manos y volvió la vista hacia su hyung qué parecía tener una mirada ganadora.
— ¿Flores?
— Le encantan esas flores y le escribí algo en esa tarjeta así que asegúrate de entregárselas.
— Creo que ella en este momento solo necesita que le digan que la aman, hyung.
— Pasaré por ella después de la operación de ahora y arreglaré todo esto.
— Espero que le resulte entonces— JungKook tenía el presentimiento de que aquel acto de afecto parecía que compraba a su noona con unas flores y le pareció ridículo.
JungKook se sentía el verdadero culpable de la mala noche de su noona y cuando la vió parada en la puerta pensó que debía disculparse como debía.
— JungKook
Ella parecía sorprendida al ver al chico y no a su esposo con un ramo de flores precioso que sostuvo en sus manos rápidamente notando la presencia de la tarjeta.
— Hyung se las envía, no pudo venir el a dejarlas por una emergencia en la clínica pero dijo que pasaría por usted después.
