Capítulo 1: El encuentro

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Era la noche en la que todo el esfuerzo, sudor y sacrificio del arduo entrenamiento finalmente habían rendido frutos. Heart se encontraba en un bar de Bangkok, celebrando junto a sus compañeros, aquellos que, al igual que ella, se habían graduado del exigente curso de seguridad de celebridades. Desde pequeña, había soñado con cuidar a alguien famoso, proteger a una figura que viviera tras las cámaras o frecuentara escenarios con lugares llenos de personas aclamando su nombre. Y esa noche, ese sueño estaba un paso más cerca de hacerse realidad. Ya se habia graduado y podría empezar a trabajar apenas pudiera encontrar a su cliente.

El bar vibraba con energía. La música, con sus bajos profundos, retumbaba en cada rincón del local, sacudiendo el pecho de quienes estaban en la pista de baile, moviéndose al ritmo de la música que sonaba por los grandes parlantes de la sala. Las luces de neón parpadeaban al ritmo de la música, mientras los bármanes preparaban diferentes tipos de tragos solicitados por los visitantes. Todos disfrutaban de maneras diferentes de esa noche de viernes.

Heart, emocionada por la noche de celebración, se dejó llevar por la alegría del momento y decidió sacar su cámara para capturar los recuerdos de la fiesta junto a sus amigos de la academia. Se movía entre la multitud tomando fotos de sus amigos, de las luces y de la gente bailando. Entre las risas y la música, se tomó algunas selfies, levantando el teléfono por encima de su cabeza para capturar la atmósfera y sus propias sonrisas despreocupadas. Sin embargo, no se percató de que, detrás de ella, se encontraba una cantante famosa y su grupo de amigos en el área VIP, algo alejado del resto.

Una de las selfies capturó sin querer a la cantante en un gesto que, fuera de contexto, podría parecer poco favorecedor. La joven notó el flash y frunció el ceño, dirigiendo una mirada fulminante hacia Heart, que seguía sonriendo, ajena a la tormenta que se avecinaba.

Con un andar decidido y furioso, la cantante se levantó de su asiento. David, un amigo de la cantante intento detenerla, pero ella se dirigió directamente hacia Heart. Sin mediar palabra, le arrebató el teléfono de las manos.

—¡Oye, qué haces! —exclamó Heart, sorprendida y tratando de recuperar su teléfono.

—¿Qué hago? —replicó la cantante con desdén mientras revisaba las fotos—. ¡Borro todas las fotos donde aparezco! No tienes derecho a tomar fotos de mí sin mi permiso, ¿o es que acaso te crees una paparazzi barata?

Heart, desconcertada y molesta, intentó recuperar su teléfono, pero la joven mantuvo un fuerte agarre. Mientras la veía deslizar la pantalla y borrando las fotos, la miraba con cara de indignación.

—No sabía quién eras, solo estaba tomando fotos de la fiesta, como todos los demás —respondió Heart, sin entender por qué la otra chica reaccionaba de forma tan exagerada.

—¿No sabes quién soy? —La cantante la miró con una mezcla de incredulidad y desprecio. Dejando por un momento de ver el celular—. Vaya, qué conveniente. Estoy en una zona privada, y yo no soy cualquier persona a la que le puedas sacar fotos.

Heart, al escucharla, sintió la irritación subirle por la garganta. No conocía a esa chica, y el tono con el que le hablaba le resultaba insoportable.

—En serio, no sé quién eres. Solo estoy aquí con mis amigos. No pretendía molestar a nadie —replicó con cierta firmeza.

—Pues ya lo hiciste —la cantante bajó la voz, su tono gélido—. Además, la calidad de estas fotos es horrible que ni yo me reconocería. La iluminación es desastrosa, tu cara, tus poses..., borrar esto es un favor para las dos. De nada...

Heart sintió cómo la sangre le subía al rostro, entre vergüenza y enojo, al escuchar el comentario despectivo. La cantante deslizó el dedo por la pantalla, borrando las imágenes sin más, antes de devolverle el teléfono con una mirada de desprecio.

Safe with me, Risk with YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora