Mi Deseo

Capítulo Único

—¡Hermano mayor, hermano mayor!

La pequeña de cabellos rubios llamaba animadamente al chico que las acompañaba.

—¿Que sucede Klee?

Preguntó el chico de trenzas con una amable sonrisa.

—¡Vamos! ¡Hay que pedir un deseo los tres juntos!

Ofreció la pequeña alzando los brazos de la emoción.

—Qiqi también quiere pedir un deseo juntos.

Venti rió melódicamente ante la petición de las niñas y asintió estando de acuerdo.

—Bien, vamos a pedirle un deseo a las linternas todos juntos.

Venti condujo su motocicleta hasta una colina cercana y al llegar a la cima se detuvo poco a poco y la dejó estacionada cerca de ellos.

Las dos niñas se bajaron de la motocicleta, Klee con más energía que Qiqi pero ambas igual de contentas.

Todos se acercaron a la barandilla, los tres pares de ojos maravillados al ver las cientos de linternas volar en el hermoso cielo nocturno, acompañando a las miles de estrellas en el firmamento.

—Vaya, es una vista preciosa.

Venti no pudo evitar admirar el cielo nocturno adornado con las linternas.

Mientras dejaba que el viento hiciera revolotear sus trenzas una sonrisa nostálgica se asomó en sus labios, con sus pensamientos comenzando a perderse en sus recuerdos.

“—¿Te gusta?”

“—¡Me gusta! ¡Por supuesto que me gusta!”

“Ese fue... Nuestro primer Rito de la Linterna juntos...”

—¡Vamos, vamos! ¡Pidamos un deseo!

La animada voz de Klee lo sacó de sus pensamientos y lo regresó a la realidad.

—Por supuesto, vamos.

La alegre sonrisa volvió a sus labios en un instante.

Los tres miraron hacía arriba, cerraron los ojos y juntaron sus manos. Cada uno pidiendo su deseo.

Sus ojos volvieron a abrirse cuando escucharon a lo lejos las explosiones de los fuegos artificiales.

—¡Ay que bonito!

Los brillantes ojos de Klee admiraban con entusiasmo el hermoso espectáculo de luces de colores que iluminaban esporádicamente el cielo, dando la despedida al magnífico Rito de las Linternas de ese año.

—Qiqi espera poder regresar para el siguiente año.

Habló la pequeña tranquilamente aunque en sus ojos se reflejaba la emoción que sentía.

—¡Volvamos el siguiente año todos juntos!

Venti rió ante las palabras de ambas niñas y asintió.

—Bueno, bueno, volvamos el siguiente año todos juntos.

Estuvo de acuerdo el mayor mientras se acercaba a su motocicleta.

—¡Si! Y espero que el hermano mayor Xiao pueda venir con nosotros.

La sonrisa de Venti vaciló unos momentos en su rostro, sin embargo, las niñas no lo notaron.

—Qiqi también espera que los cuatro volvamos juntos el próximo año.

Asintió estando de acuerdo con su chispeante amiga.