Camara - Rodrivan.

4.

Álbum de los Recuerdos
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El último día de la semana llegó con un cielo despejado y un clima agradable. Rodrigo y Iván habían decidido pasar la tarde en la casa de Iván, para relajarse y repasar todas las fotos que Rodrigo había tomado durante la semana.

Iván estaba en la sala, acomodando algunos cojines y preparando un par de bocadillos mientras Rodrigo se preparaba para revisar el material. La cámara, que había estado con Rodrigo en cada momento del día, estaba ahora sobre la mesa, junto con una laptop para ver las fotos en detalle.

"Hoy vamos a hacer algo especial," anunció Rodrigo, acomodándose en un sillón con la laptop. "Vamos a crear un álbum con todas las fotos de la semana."

Iván se sentó al lado de Rodrigo, curioso. "¿Un álbum? ¿De todas las fotos que has tomado?"

"Exactamente," respondió Rodrigo, mientras comenzaba a seleccionar las imágenes. "Quiero que veas cómo todos estos momentos se combinan para contar una historia."

La tarde transcurrió entre risas y comentarios mientras revisaban cada foto. Rodrigo explicaba por qué había tomado cada imagen y qué significaba para él. Iván observaba con atención, apreciando cada detalle y cada captura.

"Recuerdo este momento," dijo Iván, señalando una foto en la que se estaba riendo mientras comían helado en un parque. "Fue uno de los días más divertidos."

Rodrigo sonrió. "Ese día fue increíble. Cada foto cuenta una parte de nuestra historia."

Poco a poco, el álbum comenzó a tomar forma, con una mezcla de fotos espontáneas, retratos y paisajes que reflejaban la esencia de su semana juntos. Cada página estaba llena de colores y emociones, mostrando la conexión especial entre ellos.

"Es asombroso ver todo esto junto," comentó Iván, mirando el álbum ya casi terminado. "Nunca pensé que las cosas cotidianas pudieran parecer tan significativas."

Rodrigo asintió, pasando la última página. "Es que son significativas. Cada momento es una pieza de lo que somos y lo que compartimos."

Con el álbum terminado, Rodrigo y Iván se acomodaron en el sofá, revisando el trabajo final. La satisfacción de haber creado algo juntos se reflejaba en sus sonrisas.

"Gracias por hacer esto," dijo Iván, mirando a Rodrigo con gratitud. "Me encanta cómo capturas estos momentos y cómo los haces tan especiales."

Rodrigo le dio un suave codazo. "Gracias a ti por estar siempre aquí para ser parte de ellos. Sin ti, no tendría nada que capturar."

La noche avanzó y, mientras el álbum reposaba sobre la mesa, ambos se dieron cuenta de cuánto significaba para ellos ese simple gesto de tomar fotos. No era solo una manera de recordar momentos, sino una forma de celebrar su amistad y su tiempo juntos.

Antes de que el día llegara a su fin, Rodrigo y Iván se levantaron y se dirigieron a la terraza, donde se sentaron a observar las estrellas. La cámara, ahora guardada, descansaba en un rincón mientras ellos disfrutaban del silencio y de la compañía mutua.

"Me alegra tener todos estos recuerdos," dijo Iván, mirando hacia el cielo estrellado. "Cada foto es un recordatorio de lo especial que es cada día."

Rodrigo se inclinó hacia adelante, mirando también las estrellas. "Lo es. Y siempre estaré aquí para capturar cada momento, mientras los vivamos juntos."

Y así, con el cielo nocturno como telón de fondo, sabían que su amistad estaba grabada en un álbum de recuerdos, lleno de momentos preciosos y de un cariño que siempre estarían dispuestos a capturar, uno por uno.

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