Meet me at 4:00 p.m

Capítulo 1

Oh no

La mirada asesina de mi madre me indica que algo va mal, que algo hice, me inspecciono para al menos saber si es algo que se ve mal en mi. Cabello? No, está muy bien peinado, maquillaje? Tampoco, lo realizó una de las criadas del palacio y nunca le queda mal. Mi corset está bien puesto, mis zapatos igual, falda bien planchada, lo que nos deja con...

_ Cuántas veces te tengo que decir que tienes que usar tu tiara para este tipo de eventos Arabella.

_ Pero mamá, no me gusta, está gigante y me lastima.

Y es la verdad, la tiara que mi mamá siempre me exigía usar porque "una princesa no es una princesa sin una tiara y un vestido bonito" era, al menos, de 20 cm de alto, lo que hacía que mi cuello se andara constantemente doblando hacía atrás.

Esto siempre terminaba en caos, se me caía la tiara, me caía yo, me quedaba con un horrible dolor de cuello y me convertía en el hazmerreír de la fiesta.

_ Me da igual, ve y póntela.

Suspiro, jamás me voy a librar de mi mamá, verdad?

Camino hacia mi cuarto, donde se encuentra Mary Ann, mi criada personal. Le digo amablemente que me ponga mi tiara, ella con gusto acepta y la coloca sobre mi cabeza.

Puedo sentir ese agonizante peso en mi cabeza, pero sé que es algo "necesario" en palabras de mi mamá.

Mi querida madre, Lady Georgia, se hizo reina de Westernburg al casarse con mi padre, siempre que le pregunto cómo llegó a casarse con tan horrible hombre me dice que me contará después.

Aunque es un poco impaciente, es una persona increíble, cariñosa, amable, e insufriblemente dulce.

Las horas pasaron y pasaron. La luna salió y junto con ella las estrellas, indicando el inicio del baile que mi madre había preparado para que yo encontrara marido.

Cada semana hacía uno nuevo, y siempre terminaban igual, nunca encontraba nada.

Bajo al salón de baile y noto cómo todos posan sus ojos en mí. Las chicas me miran con envidia, y los chicos con deseo. No pude evitar posar mis ojos en una persona del público, no parecía un príncipe o alguien de la nobleza para nada, sin embargo había algo en él que me llamaba la atención.

Bajé cuidadosamente, sujetando mi vestido mientras lo hacía. No quería hacer el ridículo en frente de todo el mundo.

Me senté en el trono correspondiente y escuché el discurso de mi mamá por enésima vez, creo que ya me lo estoy empezando a aprender.

Todo fue como de costumbre, pasaron los candidatos y me propusieron de todo, tierras, dinero, una vida de lujos. Sin embargo nadie me propuso lo más importante de todo, hasta que...

_ Muy buenas noches princesa, Soy el príncipe Logan del reino de Tanalar, vengo acá con las mismas intenciones que todos los demás pero con promesas diferentes. Yo le propongo una vida armoniosa, llena amor y cuidados, jamás le dejaré de prestar atención. Entonces, dígame, su alteza, ¿aceptaría casarse conmigo y darme el increíble placer de ser mi esposa?