Lilith Endor
Siento mi cuerpo de vuelta. No recuerdo que fue lo que pasó y por qué lo perdí primeramente. Siento mis manos y mis piernas doloridas, al verlas percibo que contienen manchas negras, como si se hubieran incendiado y sobrevivido. Cuando miro al frente y veo a mi madre se me salen los ojos de mis órbitas.
─¿Mamá, que haces...?─ comienzo a decir hasta que me interrumpe con un fuerte abrazo.
─ Hija... lamento no haberte protegido, mis escudos han fallado y nuestra ancestra se ha metido en tu cuerpo de vuelta.
Ahora lo recuerdo todo, accedí a que lo hiciera para que me ayudara a salir del hechizo mental de la primer hada. Unos gritos agonizantes llaman mi atención, giro mi cabeza hacia el origen de esos sonidos y mi cuerpo se paraliza al ver que se trata de Brandon, que está retorciendose sobre la hierba. Me aparto de mi madre y corro hacia él, pero el hechicero Baltazar interrumpe mi paso interponiéndose entre el angel dorado y yo, con su vara en alto en posición defensiva.
─ No volverás a ponerle las manos encima, maldita bruja─ amenaza, mis ojos se encienden al igual que mis flujos de energía a causa de la incomprensión que me domina, es entonces cuando el hechicero comienza a bajar su vara─ ¿Lilith, eres tú de vuelta?
Asiento y lo rodeo para acercarme a Brandon de rodillas.
─ ¡Brandon, ¿que te ocurre?!
Él intenta contestarme pero las punzadas de dolor en su cuerpo se lo impiden, las lágrimas se acumulan en mis ojos a causa de ver esta escena.
─ La primer bruja Endor lo hechizó, un hechizo de tortura. Me lo contó por nuestra conexión mental padre e hijo... he intentado deshacerlo pero no he podido...
Limpio mis lagrimas y cierro los ojos para convocar al libro de hechizos para poder hallar el contra hechizo de la tortura, sin importarme que a unos metros de mi esté Aurora con el espíritu de la primer hada dentro. Cuando tengo el libro frente a mi busco con desesperación la parte del libros con los hechizos de defensa hasta hallar el indicado, intento ignorar mi angustia para enfocarme en decir el contra hechizo:
– No sufrirás de más torturas ni sufrimiento, tu cuerpo volverá a la normalidad...
Pero nada ocurre, no logro entender por qué. Contengo mis lagrimas mientras noto como mi fénix Dobby se posa a mi lado apoyando su cabeza en mi pierna para consolarme.
– Niña... de seguro debe ser tu ancestra quien efectúe el contra hechizo, ella fue quien se lo aplicó...
– ¿Donde esta esa miserable?– le pregunto haciendo esfuerzos para controlar los flujos de energía que comienzan a amenazar con salir de mi cuerpo a causa de la ira.
El fénix voltea y me señala con la cabeza justo donde esta Aurora. Veo como la primer bruja se materializa con su cuerpo color verde traslúcido y me sonríe con malicia, junto al cuerpo aún inconsciente de Aurora.
– El pájaro blanco tiene razón, solo yo puedo acabar con su sufrimiento...– susurra.
Me pongo de pie con suma rapidez, le doy el libro a mi madre y comienzo a caminar hacia mi ancestra con suma furia. Mi madre y Baltazar interrumpen mi paso para que no logre precipitarme sobre el espíritu.
– Mírate, las estupideces que haces por amor...
– ¡Libéralo!– le ordeno.
– Solo si te sacas de la cabeza tu plan de matar al espíritu de mi hermana– contra ataca.
– ¡¿Y eso que tiene que ver con Brandon y contigo?!
– Mi hijo me lo contó, recordó las clases que yo mismo le di sobre las especies sobrenaturales, si asesinas a un espíritu todos los que existan también morirán– me informa el hechicero.
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Sangre sobrenatural
FantasyLa vida de Lilith se pone de cabeza cuando descubre que es la única en ver el cabello plateado y los ojos de un color como el oro recién fundido del chico nuevo del pueblo de Salem. La vida de Brandon toma aun más adrenalina cuando decide atar los c...