Caminamos entre cuerpos que respiran,
pero los corazones laten huecos, vacíos.
¿Acaso ya no vemos, o simplemente olvidamos
que tras esos ojos hay almas gritando su hastío?
Vivir se ha vuelto una guerra sin trinchera,
donde el frío no es del invierno, sino del pecho.
Las manos que antes eran caricia sincera,
ahora son puños cerrados, sin derecho.
Nos devoramos con miradas cargadas de juicio,
con palabras que sangran como cuchillos en la piel.
Y al final, ¿qué queda?
Solo cuerpos en pie, pero almas en duelo, almas en hiel.
El niño que llora, ignorado en la esquina,
la madre que se agota y nadie la ve.
Somos fantasmas vagando en ruinas,
en un mundo que muere, sin que nos importe qué fue.
La traición es moneda de cambio,
el amor, una broma, una apuesta perdida.
¿Quién se atreve a tender la mano,
cuando el odio es el lenguaje de nuestra vida?
Nos cegamos al dolor ajeno,
como si no fuera a tocar nuestra puerta.
Pero al final, todos caemos en el mismo terreno,
donde la muerte nos encuentra, y la justicia está muerta.
No es el hambre lo que nos mata,
es la indiferencia, el desprecio, la soberbia escondida.
¿Dónde quedó la compasión que antaño nos ataba,
la llama que hacía más cálida nuestra partida?
Mira cómo caen los que amaron demasiado,
mira cómo ríen los que solo saben pisotear.
La vida es efímera, sí, lo hemos olvidado,
y en esa amnesia, aprendimos a odiar.
Pero aún estamos a tiempo de sanar,
aunque el reloj sigue avanzando.
Si no aprendemos a sentir, a abrazar,
nos perderemos en el eco de un mundo en vano.
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Mi Luna - Poemas De Corazón
PoesíaMi Luna - poemas del corazón es un viaje íntimo que voy a ir actualizando, este va rumbo hacia lo más profundo del alma, una colección de poemas breves que capturan la melancolía de las noches solitarias y el eco de los sueños no alcanzados. Cada v...
