Sakura, un joven prodigio del kyūdō y heredero de una influyente familia, ha pasado gran parte de su vida bajo las estrictas expectativas de sus padres. Sin embargo, todo cambia cuando su amigo de la infancia, Shoyo Hinata, lo convence de participar...
??: Ya te lo he dicho más de 4 veces, Hinata. No puedo participar en ese juego al que tanto me invitas, debo entrenar kyūdō.
Hinata: Por favor, Sakura, mi equipo necesita un líbero y tú tienes los mejores ojos de toda la secundaria Yukigaoka. Incluso estarán Izumi y Koji.
Sakura: Es lamentable que hayan perdido sus torneos, pero yo aún estoy participando en el campeonato de kyūdō. Así que no te prometo nada, pero intentaré estar ahí.
—La cara de Hinata cambiaría a una alegre al escuchar esas palabras de su amigo—.
Hinata: ¡Eso es genial! Te estaré esperando, te mandaré por mensaje dónde será.
Sakura: Espera, no te alegres tanto. Solo dije que era una posibilidad.
Hinata: Pero me aferraré a esa posibilidad, aunque sea del 1%.
Sakura: Nunca cambias. Nos conocemos hace 10 años, pero nunca has cambiado.
—Sakura suspira, voltea su vista hacia el blanco, estira la cuerda de su arco y dispara, logrando que la flecha llegue al centro del blanco de manera perfecta—.
Hinata: ¡Eso fue genial! Sé que ganarás el campeonato. Por cierto, ¿cómo tomó tu familia la noticia de que quieres ir a la preparatoria Karasuno?
Sakura: Sabes lo estricta que es mi familia con la toma de decisiones. Me gané una reprimenda horrible, pero no hay nada que hacer.
Hinata: Lamento eso...
—Lo decía Hinata mientras bajaba la mirada—.
Sakura: ¿De qué te lamentas? Ya te dije que fue mi decisión. No te culpes, y es mejor, porque no quiero que mi vida sea actuar como una marioneta de mis padres.
Hinata: Ya veo. Aún me sorprende que seas hijo de una familia tan adinerada.
Sakura: Ya te lo he dicho, Hinata, no quiero que me recuerdes eso. Somos amigos, no importa el estatus social de ninguno de los dos.
Hinata: Tienes razón. Entonces me retiro, Sakura. Iré con los de primero a ver si alguno quiere participar en el juego de voleibol.
Sakura: Suerte con eso...
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—El día del partido, se veían a seis chicos con traje deportivo verde. En sus camisas se leía "Secundaria Yukigaoka"—.
—Un chico de cabello negro, de una altura de 1,74, con la característica más destacable de sus ojos heterocromáticos—su ojo izquierdo azul, como el cielo, y su ojo derecho dorado, como el oro—, llegaba junto a los seis chicos. Un mayordomo adulto le entregaba unos zapatos para jugar voleibol—.
