Dos Caras del Mismo Amor - Lamb x Narinder

Cap. 7 Entre el Caos y el Placer (Bonus +18)

 🌹 - - LAMBERT - -  🌹

- ¿Y qué estamos esperando? -exclamó, su voz vibrante con entusiasmo-. ¡Me gustaría empezar a planear la boda! - La emoción en su voz era palpable, su sonrisa brillaba con una intensidad que casi cegaba. Para él, el momento era perfecto, y la idea de planear su boda ahora era esencial para su plan.

Don sonrió con una satisfacción casi paternal mientras Duncan lo miraba como si no pudiera creer lo que oía. Este último frunció el ceño, incapaz de ocultar su desconcierto. Narinder, sin embargo, estaba demasiado inmerso en su propia emoción para notar las reacciones contradictorias a su alrededor.

— ¡Por supuesto! —intervino Don—. ¿Qué planes tienes en mente? Haré todo lo que esté en mi poder para que tengan la boda de sus sueños.

Narinder lanzó una risa ligera, tirando suavemente del brazo de su acompañante, casi arrastrándolo hacia él de manera posesiva.

— Antes de entrar en detalles... me gustaría tener un momento a solas con él~ —anunció, mientras dirigía una mirada significativa al que tenia a su lado—. Ya saben lo tímido y reservado que es mi amado~ ... necesitamos un poco de... privacidad para hablar de esto.

Sin esperar respuesta de los demás , con un gesto firme, Narinder lo llevó hacia una habitación cercana decorada con temas marinos. El tirón, aunque suave, dejó claro quién llevaba las riendas. Con un fuerte golpe de puerta, los dos quedaron aislados, separados del resto.

Don, con una lágrima en el ojo, observó cómo se cerraba la puerta.

— ¡Al fin! —exclamó, limpiándose la lágrima con rapidez—. Estoy tan orgulloso... ¡Al fin uno de mis hijos va a casarse...no solo eso , ahora parece que están por darme un nieto! —Su voz resonaba llena de emoción, como si hubiera esperado este momento por años.

Duncan resopló, cruzándose de brazos.

— Sigo aquí padre ... —murmuró, claramente incómodo con el rumbo que tomaban las cosas.

— Sí, sí... pero con tu obsesión por el Cordero, ya pensaba que no habría esperanza contigo, ni que sentaras cabeza, jajaja 

— Gracias por la confianza, padre —respondió Duncan, frunciendo el ceño con fastidio—. Prefiero no saber qué está pasando en esa habitación... ugh. Además, tengo trabajo que hacer.

— Te acompaño, debo ir por el desayuno para todos —añadió Don, levantándose—. Dejemos que ellos tengan su tiempo a "solas" jaja. Ya hablaremos más tarde de los detalles.

Ambos se retiraron, dejando la casa en silencio, Don ya confiaba en Narinder, pero  Duncan...sabia que aquel felino tramaba algo pero no quería intervenir ya que podría sacar provecho de esto con el cordero más adelante...

Mientras tanto en la habitación: 

— Tanto tiempo sin verte...Astaroth~ Ojo Vigía y fiel adepto del obispo Kallamar~ como olvidarte a ti y a los otros fieles que seguían a mis tontos tontos hermanos... —murmuró, acercándose con una confianza intimidante—. Creí que habías desaparecido para siempre.

El adepto, aún encapuchado ya que no era de mostrarse por completo ante nadie, en parte su aspecto que creía desagradable, se mantuvo en silencio, ocultando su rostro bajo la túnica oscura. Solo se movió para sacar una pequeña pizarra y escribir en ella con rapidez antes de mostrársela a Narinder: "Todo quedó atrás. No soy quien solía ser."