𝗹𝗮 𝗻𝗼𝘃𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗺𝗶 𝗮𝗺𝗶𝗴𝗼

iv

los besos no acabaron ahí, mauro siempre que podía lo besaba.

siendo descuidado en algunas ocasiones.

definitivamente era lo mejor que le había pasado a tiago, sentirlo tan cerca de él era lo más lindo.

pero ahora se encontraban en una situación algo comprometedora.

tiago no había tenido aún su primera vez y le daba algo de nervios pensar ennla situación en sí, y ahora que lo estaba por vivir, o esl creía, lo ponía peor.

—¿estás seguro? —preguntó por tercera vez el ojiverde queriendo estár seguro, según él.

—sí, con vos sí.

mauro lo besó queriendo borrar los nervios que estaban llenando el cuerpo del morocho.

acarició con suavidad su cuerpo bajo la ropa, generandole escalofríos al morocho.

en cuanto los besos se hicieron más apasionados e intensos, la ropa desapareció dejando a la vista la piel morocha de tiago.

mauro besaba con lentitud y cierto cariño el cuello de éste, logrando escuchar los supiros que soltaba.

quizás después de aquelloz tiago sentiría más que solo amistad, aunque ya lo tenía en claro. todo iba a ser diferente.

terminaron algo exhaustos acostado en la cama. tiago estaba cansado, no había sido malo, más bien fué inesperado.

pero los besos en su espalda quejaba el ojiverde curaban todo dolor o incomodidad que pudo haber llegado a sentir.

sin duda un día especial.

todo era mejor cuando estaban juntos, y eran ocasiones raras, ya que mauro aún seguía de novio.

si se hubiera tratado de otra persona seguro no hubiera aceptado estár en una relación así, pero se trataba de mauro y era lo único que le quedaba.

últimamente había estado peleando con daniel por etupideces, pero sentía que cuando su hermano decía aquellas palabras, dolían mucho. lo hacían sentir mal.

después estaba el tema con su madre, quien una vez lo vió con ciertas marcas en el cuello, armando todo un escándalo. sí, era el mas chico, pero sin que su madre lo estuviera vigilando todo el tiempo era dificilque no estuviera tanto tiempo con mauro.

le hizo las típicas preguntas sobre sí tenía novia, afirmando el hecho de que su hijo fuera "normal" como ella solía decir.

tiago nunca había querido hablar sobre sus gustos con ella por la misma razón, ella no era tan comprensiva como lo hubiera querido.

daniel sabía y obvio que lo apoyaba, pero hasta cierto punto se volvía raro al a veces escucharlo hacer esas bromas típicas sobre "no me abracés, que se me pega lo gay".

no lo tomaba a mal pero esto significaba que no podía tomarlo con normalidad.

básicamente mauro era él único que no lo juzgaba, bueno, dentro de lo que podría llegarle a lastimar.

no siempre estaban juntos, natalia parecía querer a mauro siempre. el tiempo pasaba demasiado lento, cuando no era su turno.