El Jefe [8cho] [HOT]

Capítulo 1

Subí por el ascensor hasta la planta setenta y cuatro, en la cual se realizará la esperada entrevista.

Estaba nerviosa por lo que sucedería a partir de que entrara en aquella sala. Realmente deseaba lograr el puesto, ya que necesitaba dinero para el mantenimiento de mi nueva casa y no podía permitirme echar por tierra todo lo que había logrado.

Las puertas automáticas se abrieron y frente a mí se hallaba un pasillo de paredes claras frecuentado por bastantes empleados. Tuve que apartarme del camino de muchos de ellos porque se les veía con prisa. Al final del pasillo estaba una recepcionista tecleando en su ordenador entre papeles y carpetas.

- Perdone - dije educadamente -, vengo para la entrevista de trabajo. ¿Dónde está la sala 69?

La recepcionista levantó la vista de la pantalla y me indicó el lugar con una sonrisa.

- Siga el pasillo todo recto y al fondo en la puerta de cristal.

- Gracias.

Seguí sus instrucciones y terminé frente a una puerta donde estaba escrito: 8cho Grey. Jefe.

Golpeé la puerta suavemente con los nudillos y esperé para recibir la respuesta. Intenté camuflar mis nervios respirando hondo y calmando mi interior. "Tranquila, Laura. La entrevista irá perfectamente y tendrás el trabajo".

- Adelante - una sexy voz masculina se oyó dentro de la habitación.

Giré el manillar de la puerta y la abrí. La sala era un espacio amplio y moderno de grandes ventanas al frente. En el medio de la sala había un escritorio grande con montones de papeles ordenados y la computadora apagada. Tras ello había estanterías con libros de múltiples temas de marketing.

Frente a la mesa del escritorio había una sola silla.

El jefe de Littlement estaba de espaldas a mí, observando la ciudad por la ventana que ocupaba toda una pared. No reaccionó a mi entrada. En su mano sujetaba una copa con lo que parecía coñac.

- Siéntese, por favor. - dijo y juro que se me paró el corazón y sentí la fiera necesidad de salir corriendo. Se giró hacia mi y con un sutil gesto dejó la copa sobre la mesa de su escritorio mientras se sentaba en la silla de cuero negro. Puso las dos manos sobre la mesa y se centró en mi.

Obedecí y me senté en la silla oscura libre. 

- ¿Laura Jaylle? - preguntó mientras sacaba una hoja de papel de una carpeta. 

Asentí y me mordí el labio inferior. 

- 25 años, recién salida de la universidad, nacida en España, con una economía más o menos sostenible... - sacó otra hoja de papel junto con un bolígrafo - firme ahí. 

- ¿Qué es? - pregunté 

- Un contrato - me fijé en sus intensos ojos marrones que no dejaban de mirarme. - asegúrate de leerlo cuidadosamente, no quieras llevarte sorpresas innecesarias. 

- ¿Qué? - pregunté sin creerlo del todo - ¿es un contrato de trabajo, no? no puede haber nada excesivamente extraño. 

- Tan solo es un consejo, no una obligación - su mirada fue certera y fulminante. Me temblaba un poco la mano, pero enseguida agarré el bolígrafo que me había dejado junto al contrato y eché un par de firmas en las casillas. 

"Mierda" pensé cuando él cogió los folios, quizá debí haberlos leído mas, pero nadie lee esas mierdas al fin y al cabo. 

8cho tomó el papel con una sonrisa pícara, y su mirada, muy en el fondo, me decía que algo no iba del todo bien, pero ¿que podría ir mal si solo era un contrato de trabajo?