Novia Fugitiva

Capitulo 1

Alexandra Davenport

— ¡Lexi! ¿Dónde estás? —oigo a lo lejos a mi amiga

— ¡En mi cuarto, empacando! —grito mientras doblaba uno de mis bikinis

¿Para que necesito tantos bikinis?

Según Stella, no podía usar el mismo bikini más de una vez, por ese motivo me regaló 10 bikinis para mí luna de miel que durará solo tres días...

— Hola —Saludo Stella entrando a mi cuarto— ¿Por qué no llamas a Nancy para que lo haga por ti?

— Yo puedo hacerlo —ella bufo mirando mi maleta toda desordenada

Intenté cerrarla pero era imposible

— Pues no eres la mejor doblando ropa —decía mientras se subía arriba de ella para hacer peso y ayudarme a cerrarla

— Ves, cerro perfectamente —dije mientras recuperaba el aliento

Ella comenzó a reír y se levantó

— ¿Que haces aquí? — le pregunté, temía su respuesta, Stella a veces era muy... impredecible

— Te vengo a buscar —le mire confundida, sabía que a ella le gustaban los viajes sin previa antelación, pero mañana era mi boda y está vez no podía irme sin mas— para llevarte a tu despedida de soltera

— Stella te lo he dicho mil veces que no...

Ella tapo mi boca interrumpiendo mis quejas

— Si, si, si —bufo— "no quiero una fiesta con gigolós" —imito mi voz con un tono un poco más chillon

— ¿Entonces?

Si no era una fiesta con bailarines exóticos ¿Cuál era su plan?

— Iremos a un hotel —Intento explicarme, aunque yo estaba más confundida— comeremos bien y tomaremos unos tragos

— ¿Tarde de chicas?

Ella asintió y se sentó en mi cama para sacar un dulce de mi velador

— Con unos masajes y mojitos de buena calidad

Masajes y mojitos, eso suena a una gran despedida de solteras

— Está bien si es así, acepto

— Aceptar ¿Qué? —nos giramos al oir a Aaron, uno de mis hermanos, este estaba apoyado en la puerta

— ¿Qué haces oyendo a traves de las paredes? —cuestione molesta

— Es mi casa

Nuestra, idiota

— Es mi cuarto —Aaron soltó una carcajada al verme "enojada"

— Solo iba pasando —decía entre risas

— Vamos a un hotel

Aaron cambio su semblante y me miró pensativo 

— Que Lucien las lleve —ordeno con tono autoritario

— No necesitamos una niñera —gruñí

Se conducir y Stella también, estoy segura que la única razón de llevar a Lucien es para evitar que Stella me rapte

— No es una petición

Su tono de voz solo me confirmó que no tenía ningún sentimiento discutir, era quedarme o ir con un guardaespaldas.

— ¿Ahora cuidas a tu hermanita? —cuestiono Stella, sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo por unos segundos me paralice. ¿Qué pretendía con ese comentario?