Sam vio a Valeria en el segundo en que ella salió. El aroma de su compañera le trajo consuelo y una distracción bienvenida, ya que anteriormente había estado tratando de no mirar al nuevo e inusual aquelarre de vampiros que se encontraba al otro lado de la multitud.Valeria se abrió paso entre los invitados que habían llegado para la boda, quienes deambulaban hasta que fuera el momento de tomar asiento. Encontró a Sam en poco tiempo, de pie contra la pared del fondo con Billy, Seth y Sue; eran los únicos cuatro que se habían molestado en asistir a la boda.
Billy no quería estar allí en particular, ¿quién querría ver a la joven que vio crecer casarse con un monstruo chupasangre? Pero le debía tanto a Bella como a Charlie el respeto de asistir. Sue estaba un poco más abierta a la idea del matrimonio, simplemente porque no había sabido sobre los vampiros por mucho tiempo y, en su opinión, los Cullen eran buenos y eso era todo lo que importaba.
Seth estaba emocionado de estar en la boda. Estaba emocionado de llevarse bien con el aquelarre en general, encontrándolos –bueno, principalmente a Emmett y Jasper– tan divertidos como Valeria. Sam, por supuesto, estaba allí porque Valeria le había pedido y porque, hasta donde todos estaban concernidos, ya era parte de la familia. Si no asistía, Edward podría reprochárselo para siempre. Literalmente.
Cuando Valeria se acercó, notó que tanto Billy como Sam miraban al otro lado de la sala con expresiones nerviosas, pero tan pronto como Sam percibió el reconfortante aroma de Valeria, sus ojos la buscaron en la multitud. Sus labios, cubiertos por un labial color baya apagado, se curvaron en una sonrisa que él correspondió fácilmente.
"Hola," lo saludó, y Sam puso sus brazos alrededor de su cintura. Valeria colocó sus manos en su pecho, enderezando el cuello de su camisa. "Nunca supe que te veías tan bien con traje."
Y realmente se veía bien con traje. Era un traje negro hecho por algún diseñador italiano al que Alice lo había obligado a ponerse. El licántropo había aprendido rápidamente lo difícil que era resistirse a Alice cuando estaba decidida a jugar a vestir a los demás.
"No te acostumbres," dijo Sam, sonriéndole. "No es exactamente práctico cuando necesito transformarme de un momento a otro."
Valeria se encogió de hombros antes de esbozar una sonrisa coqueta. "Bueno, de todos modos te prefiero sin camisa."
Sam soltó una carcajada antes de dejar que sus ojos recorrieran la figura de Valeria. Era un vestido de color púrpura pastel, hecho de delicada seda; Sam prefirió no pensar en cuánto debía haber costado. En lugar de eso, pensó en cómo la prenda se ajustaba perfectamente a su cuerpo, sostenida por finos tirantes.
"Te ves hermosa," le dijo Sam, apartando un mechón de su cabello detrás de su oreja.
"No te acostumbres," lo imitó ella. "Mañana volveré a mis suéteres vintage y mis jeans holgados."
ESTÁS LEYENDO
Invisible String - Sam Uley (traducción)
Fanfic"¿No sabes cuándo comenzó la Segunda Guerra Mundial? ¿No la viviste o algo así?" "Uh, nací en los noventa." En donde los ancestros Quileute piensan que es divert...