Si decides quedarte.

Capítulo 27.

-Te aseguro que soy tu fan es increíble como te cambia la vida, organizas un viaje en familia y acabas saliendo enamorada de ese viaje y con un hombre increíble-me dice Hugo.

-Para empezar, no estoy enamorada, es cierto que ahora me gusta más que antes porque le he conocido mejor, pero estar enamorada es una palabra muy fuerte-le digo.

-Me da igual, ¿quién se va a París y vuelve de la mano del hombre perfecto? Solo tú eres capaz de eso Natt.

-No es tan fácil, además no he vuelto de su mano, ni siquiera nos hemos besado, deja de romantizar todo, gracias.

Al llegar a casa me han invadido a preguntas entre Hugo y mi hermana, por supuesto, todas sobre mi noche con Antoine. Aunque a decir verdad, han quedado un poco insatisfechos con la respuesta, ya que ellos esperaban que hubiéramos vivido una gran noche de amor. Después de desayunar, me di una ducha y me cambié de ropa para estar preparada "para el plan de Antoine" el que me tiene intrigada al no saber de qué se trata. Ahora estamos sentados en el sofá hablando todavía del mismo tema, no es que me incomode hablar de Antoine, de hecho considero que hay muchísimas cosas interesantes de las que hablar sobre él.

-¿No sabes donde puede llevarte?-me pregunta Gala.

-Ojalá lo supiese, pero solo me dejó la nota que os he dicho y nada más...-digo.

-Pero si no conoce Madrid, ¿cómo ha podido organizar una sorpresa en una ciudad que no conoce?

-Hay mil formas en internet de buscar planes, seguro que algo ha tenido que hacer para conseguirlo.

-¡Y luego tienes el valor de decir que no le gustas! Ojalá yo no le gustase a un tío e hiciese esas cosas por mí-dice Hugo.

-Existe la palabra amistad y te recuerdo que sin conocerme de nada también se ofreció a enseñarnos París, quizás es que es demasiado amable-le digo.

-Y tú demasiado idiota-dice Gala.

No les respondo y me quedo mirando al teléfono esperando un aviso de Antoine. Veo la fecha entristecida porque mañana coge el vuelo de vuelta a París y ni siquiera puedo acompañarle al aeropuerto para despedirme de él porque yo tengo que trabajar.

-¿Por qué te cuesta tanto admitir tus sentimientos?-me pregunta Hugo.

-Vives encerrada en esa coraza, pensando que te protege de algo y en realidad lo único que haces es no dejarte llevar por la que podría ser tu mejor historia-añade Gala.

-¿Queréis que os diga por qué? Bien. Porque me aterra sentir algo por una persona que vive en otro país, me aterra querer tanto a alguien y ser capaz de todo por esa persona, me aterra pensar que cuando creía que mi vida estaba resuelta ha llegado un hombre a desmoronarme todo y me aterra quererle y que él no me quiera a mí, porque no lo soportaría-digo con lágrimas en los ojos y levantándome del sofá.

No dicen nada, solo me miran desde el sofá sin articular palabra, sin ni siquiera moverse.

-¿Contentos? Ahí lo tenéis, no admito mis sentimientos porque me da miedo hacerlos realidad y no poder soportarlos.

-Ven aquí-me dice Gala mientras intenta abrazarme.

-No, no quiero compasión, no quiero un abrazo, quiero que dejéis de insistirme en que me enamore de alguien con quien me es imposible ser feliz.

Abandono el salón y camino hacia mi habitación intentando no derramar ni una lágrima. Sé que todo esto lo dicen porque me quieren y quieren verme feliz, pero yo lo que necesito que entiendan es que no puedo ser feliz con una persona a la que no puedo ver todos los días. Intento apagar mis sentimientos cada vez que estoy con él porque en el fondo sé que si me dejase llevar, me acabaría volviendo loca y no es lo que quiero.

No quiero dejar toda mi vida por un hombre al que apenas conozco, por un hombre que a pesar de ser increíble aún guarda secretos y por un hombre que vive increíblemente lejos de mi hogar y de todo lo que yo quiero. Por esos motivos prefiero que seamos amigos y mantenerle en mi vida de una forma que no tenga nada que ver con el amor.