Capítulo 38.

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Después de haber pasado una noche horrible, con dolor de espalda y preocupada por lo que pueda pasar me levanto del sofá. Salgo al exterior y busco un taxi para que me lleve a Disney y poder al menos estar más cerca de encontrar a Antoine.

-Hola, por favor a Disney-digo subiendo a un taxi.

No me importa lo que me vaya a costar, ahora mismo el dinero me es indiferente, lo único que quiero es ver a Antoine y poder estar por fin bien con él, aclarar nuestros problemas y disfrutar otra vez juntos, de la forma que sea, siendo amigos o algo más, eso no importa tampoco, lo único que quiero es tenerle en mi vida y poder abrazarle después de un vuelo espantoso.

Para mi tranquilidad y felicidad el castillo aparece enfrente de mis narices. El conductor me cobra una barbaridad pero lo pago encantada al estar feliz de volver a estar aquí. Preparo dinero para pagar la entrada y corro hacia las taquillas.

-¡Natasha!

Me giro ante la voz que grita mi nombre y veo a Louis, el compañero de Antoine.

-¡Louis! Qué alegría verte-digo dándole un abrazo.

-¿Otra vez estás aquí? Al final vas a acabar mudándote aquí, te sentaría bien un traje de superhéroe-me dice.

-Si, es una larga historia, ¿podrías hacerme un favor?

-Claro, lo que sea, cuéntame-me dice sonriendo.

-Necesito entrar al parque y encontrar a Antoine, ayer perdí el vuelo y estoy segura de que piensa que no he venido-digo nerviosa.

-¿Por qué no le has llamado?

-Es una larga historia, no tengo batería...Necesito ayuda Louis.

-Vale tranquila, veré que puedo hacer, dame un par de minutos y no te muevas de aquí-me dice señalando exactamente el sitio donde estoy.

Es una persona muy amable. El día que le conocí el rato que estuvimos juntos lo disfruté mucho, tiene grandes temas de conversación y es muy gracioso. Sé que Antoine y él son amigos, se llevan bien y comparten más a parte de ser solo compañeros de trabajo, lo cual me tranquiliza bastante ya que sé que intentará ayudarme en todo lo que pueda.

-¡Natasha!

Su voz me devuelve a la realidad y voy hacia donde está esperándome.

-Solo Natt-le digo.

A la única persona que le permito llamarme Natasha es a Antoine. Odio mi nombre pero cuando sale de sus labios suena diferente, incluso me gusta más y lo tolero.

-De acuerdo solo Natt, toma, esto es un pase para que entres conmigo y al menos puedas buscarle-me dice dándome una pequeña tarjeta de color morado.

-Gracias Louis, de corazón.

-De nada, ahora tengo que ir a cambiarme pero nos veremos más tarde, suerte con tu búsqueda y tranquila, si le veo le diré que le estás esperando por el parque-me dice.

Le sonrío y entro detrás suya. Tomo aire y comienzo a recorrerme el parque para ver si consigo encontrarle por algún lado. Pregunto a la gente si saben que Vengador está hoy en la sala y para mí mala suerte, no es Strange, por lo que se me acaban las opciones y las ideas.

Sigo buscando como una loca, finalmente decido entrar a la cafetería de Avengers Campus y veo de lejos a Antoine sin el disfraz, con una mujer morena de ojos azules. Intento acercarme disimuladamente y sin hacer ruido para poder enterarme de la conversación.

-Te quiero, deberíamos casarnos cuanto antes-dice la mujer.

Me llevo la mano a la boca y salgo corriendo de la cafetería, soy todo un mar de lágrimas y no puedo contenerme. Me falta el aire pero no me paro, si no que sigo corriendo hasta llegar a la puerta.

-¡Natt!

Me giro y veo a Black Panther correr hacia mi.

-¿Qué pasa?-me pregunta.

-Yo...Yo tengo que irme. No deberías de hacer esto, podrían despedirte-digo.

-Eso no importa ahora, ¿qué pasa?

-Antoine tiene novia Louis...-digo entre lágrimas.

-Pero eso no es posible, yo lo sabría.

-Tal vez le conozcas tan poco como yo, gracias Louis, cuídate mucho-le digo abrazándole.

-Cuídate Natt.

Vuelvo al mismo aeropuerto donde ya he estado más veces casi que en mi casa en estas últimas semanas, pero esta vez es diferente, esta vez me voy con el corazón roto y engañada.

¿Como he podido caer en sus mentiras? Ahora entiendo que no pudiese estar conmigo, porque ya está con alguien. Tengo el corazón roto, nunca antes había sentido esto y ahora entiendo que esto es a lo que llaman "qué te rompan el corazón". Maldito sentimiento de mierda. Todo por mi culpa, yo sola me he dejado engañar y si ahora estoy sufriendo es todo por mi culpa y por creer que el amor como en las películas existía de verdad.

Su carta era solo una forma más de reírse de mí, solo era eso. Sus palabras son mentira todas y cada una de ellas. No quiero volver a verle nunca, se acabó.

Si decides quedarte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora