11.- Flecha

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The Legend of Zelda y todos sus personajes son propiedad de Miyamoto Shigeru, Tezuka Takashi y Nintendo.
Palabras: 702.

11.- Flecha

Era inusual ver a Link sin la espada en la mano, aunque la esgrima no era su único talento en combate.

Zelda se sentó en el muro que rodeaba el patio del castillo y observó los blancos instalados por el espacio, los había fijos y móviles. Apostaba a que aquel entrenamiento estaba motivado por algún comentario de Revali. Link era bueno con el arco, había sido testigo de su impresionante puntería en varias ocasiones.

Link comprobó la tensión de la cuerda del arco, sacó una flecha del carcaj y apuntó. La flecha cortó el aire con un silbido y dio justo en el centro. Zelda aplaudió captando su atención, él la miró con el ceño fruncido y un millón de preguntar brillándole en los ojos, no se había percatado de su presencia, lo cual tenía cierta gracia porque parecía tener un sexto sentido para saber cuándo estaba cerca.

—¿Por qué has cambiado de entrenamiento?

—Tengo que mejorar mi puntería.

—¿Es cosa de Revali?

Link no contestó lo que significaba que así era.

Lanzó una ráfaga seguida de tres flechas que impactaron en el centro de tres dianas diferentes. Link sacudió la cabeza como si no estuviera satisfecho con lo que acababa de hacer.

—Oye, Link —musitó observando como disparaba de nuevo con una precisión envidiable—. ¿Me enseñarías a usar el arco?

La cuerda resbaló de sus dedos y la flecha se clavó en la hierba a una gran distancia de la diana a la que apuntaba. La miró sorprendido.

—Siempre que os veo entrenar me dais un poco de envidia. Se lo pediría a Revali, pero creo que acabaría inmersa en un entrenamiento a vida o muerte, saltando por un acantilado con otros orni disparándome y sin instrucciones previas.

Él pareció sopesarlo y finalmente asintió. Zelda se le acercó sin darle tiempo para arrepentirse. Link le ofreció el arco y ella trató de imitar la postura que él había adoptado mientras apuntaba, tiró de la cuerda, a pesar de no haber ninguna flecha. La mano de Link modificó la postura del brazo con el que asía la cuerda, alzando su codo, sintió la tensión extenderse por sus músculos. No era tan simple como le había parecido.

—Suelta la cuerda.

Lo hizo, la tensión le reverberó en la muñeca al ser liberada. Bajó el arco. Link sacó una flecha del carcaj, la colocó en el arco y se pegó a su espalda para ayudarla a adoptar la posición correcta.

—Separa un poco las piernas —susurró él.

Logró hacerlo sin que le temblasen las rodillas. El corazón le latía con fuerza con su cercanía, no estaba preparada para que se pegase a ella. Link, que acostumbraba a esquivar el contacto físico y que lo más osado que había hecho hasta entonces había sido agarrarla de la mano, estaba completamente pegado a su espalda.

—¿Cómo se apunta?

—La flecha a la altura de los ojos, la punta debe estar un poco por encima del centro de la diana. —Zelda lo intentó, el brazo le temblaba por la tensión de la cuerda—. Suéltala.

La flecha voló y se clavó en la hierba junto al blanco.

—Que mal... —pronunció decepcionada con su poca puntería.

—Es el arco —dijo él—. La tensión no es la correcta para ti.

—Por favor, no me digas que necesito un arco para chicas —espetó apartándose abruptamente.

Link tenía el ceño fruncido como si fuese incapaz de entender las palabras que había pronunciado.

—Para principiantes. La tensión es menor —explicó deseando que no se lo tomase como un insulto o como el comentario de alguien que se cree superior a los demás—. Buscaré uno en la armería.

Principiante. Bien, sí eso es lo que era. Estaba tan acostumbrada a que su padre la infravalorase que acababa saltando sin motivos.

—Lo siento. ¿También hay flechas para principiantes?

—Las buscaré.

Y Zelda supo que lo haría y que le enseñaría.

Continuará

Notas de la autora:
¡Hola! Lecciones de tiro con arco para hoy. Es mejor entrenar con Link que con Revali, seguro que Link es mucho más paciente.
Mañana más.


Lluvia y ruinas. Fictober 2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora