Narra Emily
Me costó mucho dormir sabiendo que Hannah estaba a sólo unos metros de distancia. Me hubiera gustado renovar nuestras charlas nocturnas, pero sigo molesta con ella y necesito que lo entienda.
Mamá llegó muy tarde luego de llevar a Ellis al médico, terminó quedándose dormida en su cama, acurrucándola entre sus brazos como una mamá osa que protege a su cría.
Soy la primera en despertar, la casa está invadida por un silencio sepulcral y parece no haber vida dentro, sólo yo mirando el techo en busca de respuestas a mis miles de preguntas.
- ¡Vete! Ésta no es tu casa ¡Tú no tienes casa! - chilló Ellis, parada en frente de Hannah con sus calcetas de unicornio y un enojo demasiado grande para su pequeño cuerpecito.
- ¡Ellis! No seas grosera - la regañé, mientras que mi amiga se despertaba desorientada y confundida.
- ¡Consigue tu familia! - agregó la niña, sacándole la lengua con muy malas intenciones.
La levanté y noté que ya no emanaba ese calor febril, se nota que está mucho mejor.
- Bebé, no tratamos así a las visitas - dije, intentando no reírme para dar un buen ejemplo.
- Auch ¿Por qué sabe tanto sobre mi vida miserable? - preguntó Hannah, frotando sus ojos cansados.
- No tengo idea, no recuerda ningún número por arriba del 20 pero sí recuerda perfectamente cada detalle sobre tí - dije, viendo cómo ella se aferraba a mí, creo que todo ésto no es más que un ataque de celos.
- Descuida, revoltosa, no quiero robarme a tu hermana - acarició su cabello, sin temor a perder la mano.
Ellis le pegó varias veces, nunca es así de agresiva, creo que será imposible que éstas dos se lleven bien.
- No golpees, Hannah ya se va - mentí, para evitar que hiciera un escándalo.
- ¿Ellis está aquí? - preguntó mamá, recién levantada.
- ¡Dile que fuchi! - exclamó la pequeña, con el ceño fruncido.
- Sí...y veo que ya está mejor - dije, entregándole al paquete rabioso para que se hiciera cargo.
- Lo está, anoche tuvieron que ponerle dos inyecciones, parece que ayudaron - explicó, acomodando esos finos cabellos rubios.
- Será mejor que la mantengas lejos de aquí - advertí, al notar la mirada de odio que le estaba dedicando a Hannah.
- Yo creo que sería mejor decirle adiós a Hannah, tu mamá no está contenta con su llegada sorpresiva, si se va antes de que despierte le irá mejor - nos advirtió, dándonos unos cuantos minutos de ventaja.
Cerró la puerta y ambas nos quedamos mudas, no nos fuimos a dormir en los mejores términos, así que ahora todo se sentía tenso.
- ¿Puedo decirte a qué vine? - preguntó, fría como siempre.
- Puedes, es un país libre - respondí, poniéndome mis pantuflas de garritas.
- Una familia quiere adoptarme, irán a verme al orfanato ésta tarde, se supone que están conmovidos por mi historia o algo así, deben creer que soy un caso de caridad - dijo, revoleando sus ojos como si ya odiara a esas personas sin siquiera conocerlas.
- Tal vez deberías darles una oportunidad, si son tan malos como crees, sólo muestrales tu verdadera personalidad y saldrán corriendo - bromeé, sacándole una sonrisa.
- Intentaré hacer un esfuerzo, pero no te prometo nada - rió, acercándose para tomar mi mano.
- Emily, el verdadero problema es que...ellos viven en Nueva York, y si deciden adoptarme me llevarán con ellos, tal vez nunca volvamos a vernos - dijo, provocando un horrible dolor en mi pecho y un nudo en mi garganta que hacían presión sin parar.
- Nueva York está...bastante lejos - dije, sin saber por qué su partida me afectaba tanto, no debería ser así.
- Lo es, y por lo que escuché, es gente de dinero, podría tener una mejor vida -
- Yo...lo entiendo, tú mereces tener esa vida - dije, fingiendo que no me dolía.
- Gracias por entender, te enviaré un mensaje ésta noche para decirte cómo salieron las cosas - dijo ella, colocándose sus tennis para regresar por donde vino.
- Si quieres puedo ir al orfanato ésta noche, no creo poder estar mucho tiempo, pero al menos podré escuchar lo que sea que tengas para decirme - propuse, temiendo no volver a ver esos hermosos ojos.
- Cool, me parece bien, nos vemos ésta noche, pelirroja - dijo, robándome un último beso antes de abrir mis ventanas y saltar a su rama de confianza como lo hacía siempre.
No esperaba que las cosas fueran así, no siento nada por ella...o eso creí, todo es confuso y ahora resulta que la perderé sin saber si pudo haber sido mi primer amor.
Narra Addison
Escuché a Hannah caer desde el árbol mientras peinaba el cabello de Ellis.
- Ya se fué, espero que no vuelva - dijo, cruzando sus brazos y creyendo ser amenazante.
- Mi amor, tienes que dejar ese odio por Hannah, no es bueno - dije, colocándole un lindo lazo a su cola de caballo y dándole un besito en la mejilla.
- No me gusta ella - protestó, recibiendo mis besos.
- Lo sé, pero mejor olvidemos eso ¿Quieres ayudarme a levantar a tus hermanos? Les prepararé un rico desayuno - propuse, sacudiendo sus bracitos y haciéndola reír.
- Iré a despertar a mami - dijo, corriendo hacia mí cuarto para darle los buenos días a su mamá.
Ellos tres aún siguen bastante enfermos, así que voy a preparar un desayuno ligero y les daré todo el amor que tengo para sanarlos. Antes de bajar, fuí a buscar a Emily para que me diera una ayudita en la cocina, pero al entrar a su cuarto, la encontré llorando muy angustiada.
- Mi vida ¿Qué pasa? ¿Te peleaste con Hannah otra vez? - pregunté, sentándome a su lado y dándole un abrazo sanador.
- Hannah se irá, una pareja de neoyorquinos con dinero planea adoptarla, ya no voy a verla nunca más - dijo, sollozando sobre mi hombro.
- Cariño...lo lamento mucho, sé que ella es muy importante para tí - sobé su espalda y dejé que descargara sus emociones sobre mí, mamá puede con todo.
- Me siento egoísta, sé que ella merece tener una familia y ser felíz...pero no quiero que esté tan lejos - se separó y limpió sus lágrimas, intentando calmarse.
- Lo que sientes es normal, bebé, no eres egoísta por eso, a todos nos duele perder a un ser querido o tenerlo lejos -
- ¿Y qué puedo hacer para que no me duela? -
- Esperar, sé que suena trillado y que parece ser el peor consejo del mundo, pero el tiempo ayuda a sanar, te da una nueva perspectiva y alivia lo que alguna vez sentimos. Eres una chica fuerte, créeme, estarás bien - dije, limpiando su rostro con la yema de mis dedos, haciendo lo mejor que podía para curar su primer corazón roto.
Ella me abrazó nuevamente y me sentí agradecida por tener una conexión tan grande con mi hija. Sé lo mucho que le duele, pero es joven y está llena de vida, podrá superarlo, y yo estaré con ella en cada pequeño paso.
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Addie con Hannah : 🥰💕✨🥳
Ellis con Hannah : 😡💀🤮👊🏻
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Algo Contigo // Segunda Parte // Meddison
FanfictionLos años pasaron, Meredith y Addison formaron una hermosa familia y son dos de las cirujanas más respetadas en todo el país. Aún así, existen muchos desafíos por enfrentar que pondrán a prueba su amor.