Nuevo año, y como se debió imaginar, nuevos alumnos.
No había nada de malo en ello hasta que llegaban a la parte, dinámica de integración.
No era tan ridículo como solía serlo en la secundaria, puesto que, ya estaba en su tercer año de bachillerato o preparatoria.
Agradecía que su apellido estaba a la mitad de lista, y lo hacía porque cada que debían presentarse a sus nuevos compañeros era por orden de lista.
No había estado tan atento hasta que escucho a su profesor hablar.
—Segunda vez que lo llamó Lee, acérquese por favor, ya sabe la dinámica- miro a el profesor con poco interés y se levantó de su asiento para caminar hacia el frente.
Y no pudo evitar clavar sus uñas en las palmas de su mano cuando escucho esa molesta voz gritar algo hacia su persona, porque sabía que por más que quisiera, no podría lanzarse hacia ese molesto "adefecio" según el, y jalarlo de los pelos.
—¡Oh mierda! Pero que bonito culo- llego a el frente y cuando dirigió su vista hacia los demás identifico a Hwang sentado con las piernas sobre su mesa, qué al hacer contacto visual le mando un beso.
Todos rieron ante el comentario, e incluso el profesor dejó escapar una pequeña sonrisa que borro, y conocía a su profesor, estaba lejos de caerle mal, así que la sonrisa era causada por que de cierta forma a el profesor le causaba gracia este tipo de cosas entre sus alumnos.
—Por favor joven, guarde sus comentarios para decirlos a el privado- Solo escucho la risa molesta de su compañero cuando el profesor le dio el permiso de hablar.
—Buenos días, mi nombre es Lee Felix, y espero llevarme bien con todos los alumnos nuevos- hizo una reverencia antes de volver a su sitio.
Y oh claro, como olvídarlo, le tocaba un asiento delante de Hwang, increíble.
Solo reposo cómodamente su espalda sobre el respaldo de la silla, esperando que todos terminen la presentación para los alumnos nuevos que aún no conocía.
Miro sus uñas, revisando que cada una de ellas estuviera perfectamente alineadas, ni tan largas ni tan cortas y con un color natural, que no tengan algún pedazo de piel imperfecta y que se mantuvieran limpias.
No era un perfeccionista, claro que no, pero tenía alguna obsesión extraña con sus manos qué lo hacían revisarlas a cada cierto tiempo.
Incluso solía tener más productos para manos y uñas qué para su propio rostro.
Olvido eso y presto atención hacia el frente, donde yacia el profesor explicando el nuevo año escolar en bachillerato.
—Al igual que todos sus compañeros, me presentare- hablo e hizo una pausa para caminar de un lado a otro en el extenso salón —Mi nombres es Yung Young, maestro de todo lo relacionado con lo que es historia, relativamente en mi enseñanza incluyo temas alargados, que vienen siendo; economía, leyes, derechos y geografía.
Dejo de prestar atención en cuanto el profesor Yung comenzó a adentrarse a un tema superficial, como los derechos.
Por otro lado, saco su celular, revisando sus notificaciones o algo parecido, no era como que había esperado en todas las vacaciones el nuevo año de preparatoria con ansias.
Solo quería estar en su habitación y dormir entre sus sábanas blancas, nada más que eso.
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La campana de receso ya había sonado, y se quedó unos segundos más en el salón en cuanto choco con uno de los alumnos nuevos, no era muy común que entren nuevos, solo en casos de emergencia, o no tan considerados como una, pero algo que no podía esperar.
