HP - ¡Monarca de las Sombras!

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Regresando a Hogwarts 04.

[Tamaño del capítulo: 2200 palabras.]
Punto de vista en tercera persona

Hogwarts.

...

...

—Me alegra que lo pregunte, director. Lo que quiero es muy simple: quiero permiso para salir de Hogwarts, acceso a la sección restringida de la biblioteca y mi derecho a la autodefensa contra cualquier estudiante que me ataque —dijo con calma, porque aunque encontraba que esta escuela tenía carencias, todavía había mucho que disfrutar en ella, y en este mundo con escasa tecnología avanzada, podía absorber una gran cantidad de conocimientos de los tomos y estudiar magia.

Dumbledore lo miró por un momento, tratando de comprender lo que acababa de escuchar. Incluso los retratos guardaron silencio mientras esperaban a ver qué pasaba.

—¿Quieres dejar la escuela cuando quieras, tener acceso al ala prohibida y el derecho a usar magia contra otros estudiantes? —Dumbledore levantó una ceja, sorprendido por la audacia de este nuevo Snape.

Snape simplemente se encogió de hombros. "Ese es mi trato, y no estoy buscando negociarlo, pero no lo tomes demasiado en serio. Necesito dejar la escuela a veces fuera de las clases; no dejaré que mis calificaciones bajen, eso te lo puedo asegurar. En cuanto a la sección prohibida, estoy buscando desarrollar nuevas ramas de la magia. Estoy seguro de que será muy útil para el mundo mágico. En cuanto al uso de la magia en los estudiantes, no es como si fuera a lanzar hechizos a cualquiera. Solo espero tener mi derecho a la defensa sin preocuparme de que alguien diga después que lo que hice estuvo mal", dijo Snape con calma, y Dumbledore todavía estaba procesando estas palabras.

—No puedo hacer eso, muchacho —dijo finalmente.

—Entonces firma la carta y me voy —dijo Snape con calma.

—Tampoco puedo hacerlo hoy. ¿Puedes esperar unos días? —Intentó con otro enfoque.

—Bien, voy al Ministerio de Magia. Estoy seguro de que a los periódicos les encantaría publicar cómo el mago de la luz usa a sus estudiantes para la Legeremancia. Pensé que eso era algo que llevaba a la gente a Azkaban. Sin duda les encantaría leer mis recuerdos y lo que sentí en esta habitación esta noche con un Pensadero —dijo Snape mientras se daba la vuelta para irse.

"¡ESPERA!" Una vez más, se produjo una explosión mágica cuando Dumbledore liberó sus verdaderas emociones y se levantó de su silla.

—Directamente, ¿estás amenazando con apuntar con tu varita a un estudiante? —Snape solo sonrió, mirando la mano del Director cerca de su varita, pero preparado para contraatacar. Su mirada se dirigió a los retratos mientras ignoraba al Director—. Ancianos de otros tiempos, ¿han caído tan bajo como para leer recuerdos y amenazar con usar una varita contra un estudiante de dieciséis años? —Snape planteó la pregunta.

"Creo que tiene razón...", decía un retrato.

"En mi época había estudiantes que realmente necesitaban una lección, pero incluso los profesores que hacían esas cosas eran expulsados e incluso encarcelados", decía otro retrato.