Un beso será el detonante a la curiosidad, la tentación y el deseo de dos inexpertos amigos...
*Ship: JinMin (Jin X Jimin)
*Mención de otros idols.
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Desastre.
Esa era la palabra perfecta para describir su mañana. Un rotundo y completo desastre. Jimin sintió que el universo se estaba desquitando con él de alguna manera, para iniciar su alarma no sonó y su consecuencia fue llegar tarde a la clase de profesor Choi, el hombre no tuvo piedad cuando delante de toda la clase señaló su tardanza y la poca responsabilidad que tenía.
Pasó toda la mañana siendo un torbellino de caos. Tropezó en el corredor, sus lentes de contacto cayeron por el drenaje del lavamanos, olvidó su libro para la clase de matemáticas, y su cabeza dolía como el infierno.
Sin duda una mañana desastrosa.
Cuando el timbre anunció el final del primer periodo de clases, sintió que al fin podía respirar un poco, sintió la vibración de su celular en su pantalón y se apresuró a sacarlo y mirar de que se trataba.
—«Te veo en la cafetería en 15 minutos.»
Leyó.
Recogió sus libros y los metió con cuidado en su bolso para luego salir casi disparado por los pasillos de la escuela.
Cuando por fin llegó a la entrada de la cafetería reconoció la cabellera castaña de su amigo y sin duda sus hombros anchos. Se acercó, pero detuvo su paso a mitad de camino cuando vio a un chico acercarse al castaño. Guardó la distancia y espero a que el chico se fuera para volver a su camino.
— Hola — saludó una vez cerca. Tomó asiento y dejo su bolso a un lado.
— Te dije diez minutos, Jimin, ¿Por qué tardaste? — reprochó con el entrecejo fruncido.
Jimin se encogió de hombros.
— De hecho llegué antes, pero ví que Taemin se te acercó y no quise interrumpir lo que sea que estuviesen hablando.
— Esa era la idea, Jimin.
Ambos amigos comenzaron a comer sus almuerzos.
— ¿Qué pasa, Jin? ¿Acaso no salió bien la cita? — preguntó curioso.
El castaño dejo salir un suspiro —. Fue un fracaso — soltó cabizbajo mientras jugueteaba con el tenedor y la comida.
— ¿Que tan malo?
— Bueno, veamos. Salimos después de clases, él me llevó a un arcade en el centro comercial y estuvimos jugando por un buen rato, después salimos y nos fuimos hasta el parque, todo iba bien hasta que él me beso — Jimin arqueó una ceja —. Sus manos bajaron de mis hombros a mi cintura y finalmente llegaron a mi culo, allí fue cuando todo se echó a perder.
— ¿Que hiciste?
— Entre en pánico, supongo — meditó unos segundos antes de seguir hablando —. No lo sé, la verdad es que fue increíble, pero cuando sentí que iba a avanzar más me dió miedo y lo detuve. Le dije que quería irme y simplemente salí corriendo del lugar dejando a Taemin confundido.
