𝐀 𝐖𝐇𝐈𝐒𝐏𝐄𝐑 𝐓𝐎 𝐓𝐇𝐄 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓; 𝖮𝗄𝖺𝗋𝗎𝗇

𝖢𝗁𝖺𝗉𝗍𝖾𝗋 𝗈𝗇𝖾

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Era una mañana normal, el clima era frío y había pequeñas hojas por todos lados.
Yo me encontraba al fondo de mi salón, esperando que iniciaría la clase mientras que a mi alrededor se encontraban Aira y su grupo de amigas. Por alguna razón siempre se acercaban a mi, aunque yo sabía que no lo hacían con buenas intenciones.

— Annie, ven aquí un momento—pidió la chica de cabello rosa.

— um, ¿qué sucede?—voltee a verla sin acercarme.

— tienes que ver esto—señaló el bote de basura. — hay algo que puede interesarte

Pude notar como sus amigas aguantaban las risas tapándose la boca.

— que graciosa—dije con un tono molesto.

— vamos Annie, lo digo enserio. Solo ven a ver—seguía señalando el bote.

— no caeré otra vez, así que no insistas...

— ¿y si hubiera algo que hayas perdido?, ¿como aquella pulsera que te regalo tú papá?—movió las cejas.

— ¿qué?—exclame con sobresalto.

— ¿no me crees?, acércate y compruébalo...

Sin pensarlo dos veces me acerqué y mire hacia aquel bote de basura.
Como dijo Aira, mi pulsera se encontraba allí, así que procedí a meter las manos para intentar sacarla.
No tardando escuche varias risas de burla hacia a mí y justo cuando iba a voltearme para que ver qué sucedía, sentí la presencia de alguien detrás mío. Era él... empapado de agua helada mientras respiraba de forma agitada.

— pero ¿qué diablos?—exclamó Aira confundida al ver que el agua no había caído sobre mí.

— ¿t-te encuentras bien?—preguntó él mientras temblaba.

Por alguna razón no respondí y simplemente me quede mirándolo confundida pero con una pequeña sensación de nervios.

— oye ¿quien te dijo que podías entrar aquí?—exclamó molesta por la acción del chico.

Él no respondió a su pregunta y solo me ayudó a ponerme de pie, ya que anteriormente me había hincado para buscar mi pulsera.

— te estoy hablando—trató de tocar el hombro del chico pero él se apartó.

— no vayas a intentar hacerlo de nuevo—la miro fijamente. — deja de ser tan inmadura...

— ah... ¡¿y tú quien diablos te crees?!—molesta.

Aquel chico solo la ignoró y segundos después salió del salón sin decir una palabra más.

No podía dejar que él se fuera de esa forma, ni siquiera le había dado las gracias; tomé mis cosas y salí del lugar lo más rápido que pude, para tratar de alcanzarlo.

— disculpen, con permiso—dije mientras pasaba por los pasillos de la escuela repletos de alumnos.

¿Por donde se habrá ido?. Me pregunte a mi misma mientras lo buscaba por todos lados.
Por un momento pensé que ya no lo encontraría pero fue en ese momento cuando lo vi, estaba sentado... al fondo de un salón, leyendo... por la portada creo que leía algo sobre ovnis y cosas así; sin pensarlo más entre y tomé valor para poder hablarle.